Elionor de Borbón ha puesto rumbo a América en una travesía marítima que durará 22 días. La hija de Felipe y Letizia continúa con su formación militar, que ahora la obliga a pasar seis meses a bordo del buque-escuela Juan Sebastián Elcano. Entre las prácticas que debe realizar, precisamente se encuentra esta de tener que soportar tantos días en alta mar mientras ponen en práctica todos los conocimientos marítimos que han adquirido durante la formación. Si le preocupa algo ahora mismo, sin embargo, no es nada que tenga que ver con los nudos marinos… sino con un encuentro protocolario que podría tener cuando llegue a Estados Unidos.
Después de unos días en las Islas Canarias, ahora toda la tripulación se dirige hacia Salvador de Bahía, en Brasil, que supondrá la primera parada de todo el periplo que tienen preparado por Sudamérica. Una vez hayan visitado Uruguay, Chile o Panamá; los 75 guardiamarinas aterrizarán en Nueva York y allí podrían convocar a la princesa española a una reunión que no le haría ninguna gracia.
¿A qué nos referimos? La revista Lecturas ha recordado que, en su momento, Felipe de Borbón aprovechó la parada en Washington para mantener un pequeño encuentro con el presidente Ronald Reagan. Era 1987 cuando el entonces príncipe debía pasar la prueba y demostrar cómo se las apañaba en este encuentro en la Casa Blanca. Ahora, si realmente quiere seguir todos los pasos del padre, Elionor tendrá que hacer lo mismo… pero con Donald Trump.
¿Por qué se reunirían Elionor y Donald Trump?
El objetivo de aquella reunión fue que el heredero y el político hablaran sobre las relaciones entre los dos países, algo que pudieron hacer sin problemas en su época. Con el presidente actual, sin embargo, no sería tan tranquilo ni mucho menos. Sobre todo ahora, después de las declaraciones que ha concedido en las que incluye a España en los BRICS. No está confirmado que esta reunión llegue a producirse, pero sería una posibilidad.
¿Qué dice la Casa Real al respecto? Preguntados por Lecturas, dicen que no cierran las puertas. Ahora bien, todavía no está decidido del todo: «Aún no tenemos nada planeado y no podemos decir gran cosa, quizás más adelante«. Sería una auténtica bomba que realmente organizaran esta reunión, ya que titulares habría un montón y la incomodidad de Elionor sería más que evidente después de pasar un rato -seguramente bastante desagradable- con el presidente de los EE.UU.
También parece difícil imaginarla como pacificadora, ahora que las relaciones entre los dos países están un poco tensas. El tiempo dirá, sin embargo, si realmente quieren darle un papel así o no.
