El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, ha advertido a Donald Trump que “no hay ningún indicio de que los rusos se estén preparando para terminar la guerra”. El aviso de Zelenski llega el mismo día en que mantendrá una reunión telemática con Trump y un grupo de líderes europeos para hablar del futuro de Ucrania antes de la cumbre entre el presidente de Estados Unidos y el presidente de Rusia, Vladímir Putin, en Alaska. El presidente ucraniano considera que es necesario “aprovechar la experiencia de Ucrania” y “no permitir ningún engaño” de Putin, en referencia a los constantes incumplimientos del Kremlin de los acuerdos firmados en los últimos años. Zelenski pide a los líderes internacionales, especialmente a Trump, que “presionen a Rusia para lograr una paz justa”.
Zelenski ha viajado este miércoles a Berlín (Alemania) para reunirse con el canciller alemán, Friedrich Merz, principal impulsor de la ronda de llamadas que se realizará durante el día para intentar acercar posturas. Así lo ha confirmado el portavoz del presidente ucraniano, Serhii Nykyforov, según la agencia Ukrinform. El líder ucraniano ha reclamado “esfuerzos coordinados y acciones conjuntas de Ucrania, EE. UU. y Europa” para “forzar a Rusia a la paz”. Pero mientras la Unión Europea exige que Kiev tenga un papel clave en la redacción de un hipotético acuerdo de paz, Trump va por libre como siempre y pretende imponer un acuerdo negociado que permitiría que Rusia se quedara con buena parte del territorio ucraniano que ha ocupado de manera ilegal desde 2014, incluida Crimea.

Agenda frenética con presencia de Sánchez
Merz y Zelenski mantendrán una reunión bilateral en Berlín y luego participarán de la videollamada con Trump, el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, y el resto de líderes europeos invitados. La representación europea está formada por la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, el presidente del consejo, António Costa, el presidente francés Emmanuel Macron, el finlandés Alexander Stubb, la italiana Giorgia Meloni, el polaco Donald Tusk y el primer ministro británico, Keir Starmer. A última hora también ha confirmado su participación el presidente español, Pedro Sánchez.
Fuentes de la Moncloa explican que el ejecutivo español da “la máxima prioridad a la unidad europea en momentos tan críticos como el actual”. El posicionamiento europeo es el expresado en el comunicado que se publicó este martes, en el cual reclamaban un papel activo de Kiev en las conversaciones y la necesidad de acordar un alto el fuego para poder obtener resultados “significativos”. En el documento, firmado por los líderes de 26 países de la Unión Europea —todos excepto Hungría—, alaban los “esfuerzos” de Trump por intentar poner fin a una guerra que ya dura tres años, pero advierten que una paz “justa y duradera” solo se puede alcanzar respetando el derecho internacional, “incluyendo los principios de independencia, soberanía, integridad territorial y que las fronteras no pueden ser modificadas por la fuerza”.
Trump, como ya ha hecho en otras ocasiones, adelantó el lunes que un acuerdo de paz implicará necesariamente “intercambios de territorio”, lo cual significa que Rusia deberá devolver “algunos territorios” ocupados, pero al mismo tiempo implica que podrá conservar otros. En Bruselas no quieren oír hablar de un acuerdo de paz sin Ucrania, pero tampoco sin la Unión Europea, ya que Rusia es la principal amenaza a la seguridad del continente. “La guerra de agresión de Rusia contra Ucrania tiene implicaciones más amplias para la seguridad europea e internacional. Compartimos la convicción de que una solución diplomática debe proteger los intereses de seguridad vitales de Ucrania y de Europa”, concluye el texto del 26.