Pedro Sánchez concreta por primera vez sus intenciones de reconocer el estado palestino. Así lo ha anunciado a un acto preelectoral del Partido de los Socialistas de Cataluña, celebrado este sábado en el Palacio de Congresos de Barcelona en medio del camino hacia las elecciones europeas del próximo 9 de junio. Ante un importante contingente de militantes socialistas catalanes, el jefe del ejecutivo español ha reiterado la intención del Consejo de Ministros de hacer explícito el apoyo del Estado a Palestina a raíz de la invasión israelí. Expresará esta postura oficialmente ante el legislativo, de hecho, esta misma semana. «Lo anunciaré ante las Cortes Generales el próximo miércoles», ha confirmado en el mismo
El anuncio, tal como confirmó Sánchez la pasada semana, se tenía que aplazar respecto del Consejo de Ministros del próximo martes. Moncloa, recuerda, está todavía trabajando con otros países aliados para coordinar un bloque internacional que apoye a las reivindicaciones palestinas, justamente mientras las Fuerzas de Defensa de Israel intensifican el fuego en Gaza, pero también en la ciudad de Rafah, en el sur del territorio, donde se congrega buena parte de la población refugiada después de los ataques israelíes. Se da, pues, 24 horas más para acabar de confeccionar este espacio transfronterizo, al poco de una nueva defensa de sus acciones por parte de los representantes del gobierno de Binyamín Netanyahu delante el tribunal internacional de justicia de La Haya.
Cuerpo a cuerpo con el partido popular
El proceso de reconocimiento del estado palestino ha generado importantes hostilidades por parte de la derecha española. El expresidente del gobierno José Maria Aznar, que permanece como uno de los líderes intelectuales de las corrientes más ultramontans dentro del Partido Popular a través de la fundación FAES, rechazó el mes pasado cualquier concesión a la causa palestina. «Un estado palestino ni existe ni existirá», declaraba Aznar, descartando como «absurda» la posición de Moncloa. En respuesta en estas declaraciones, Sánchez ha pasado al ataque: no solo ha reivindicado el sí internacional a las autoridades palestinas -«y tanto que existen, y España los reconocerá»-, sino que ha golpeado Aznar por su rol en la guerra de Irak. «No miramos los conflcites y los rehuimos, o nos metemos de pleno, como hicieron otros en guerras ilegales», ha reprochado el jefe del ejecutivo.
