La lluvia llega este viernes como una brizna de aire fresco en medio de una persistente sequía que ha llevado las reservas de agua de Cataluña al límite. Según las previsiones del Servicio de Meteorología catalán (Meteocat), pero, no lloverá bastante para revertir la emergencia hídrica. La oleada de aire frío llega acompañada de unas lluvias exiguas que se extenderán por todo el territorio durante este viernes. Ahora bien, las previsiones indican que caerán cuatro gotas, es decir, que en muchos casos no será necesario coger un paraguas. Los puntos del territorio donde se notarán más los chubascos están en las comarcas de la Vall de Arán, el Alta Ribagorça y el Alt Urgell, donde incluso pueden ir acompañados de nieve.
Durante las primeras horas del día, el cielo de las comarcas de Poniente y de las Tierras del Ebro, especialmente en las comarcas de la Terra Alta, el Segrià y la Noguera, quedará cubierto por nubes que descargarán algún chubasco. Estas lluvias serán débiles durante buena parte de la mañana, pero a partir del mediodía pueden aumentar ligeramente la intensidad: «Hasta mediodía se espera precipitación débil en el tercio oeste del país y es probable en el resto del Pirineo y Prepirineo y mitad oeste», apuntan desde el Meteocat, que no descarten que las lluvias también se puedan extender por el resto de puntos del país durante la mañana. Ahora bien, de cara por la tarde, las lluvias se desplazarán ligeramente hacia el litoral catalán, especialmente en el Barcelonès, el Vallès Oriental, el Baix Llobregat y el Maresme.

El retorno del sol
La aparición de las lluvias en Cataluña, pero, será prácticamente insignificante. Según la previsión del servicio meteorológico de Cataluña, el sol volverá a convertirse en el gran protagonista del cielo catalán, y las precipitaciones quedarán limitadas a la cota más alta del Pirineo y en algunas poblaciones de la comarca de la Selva. De cara por la tarde, pero, el agua volverá a esconderse y el sol brillará con fuerza.