El final de La Travessa: expedición Ponent se acerca. Los aventureros y aventureras enfrentaban un reto: superar todas las pruebas y recorrer más de 300 km de territorio de sur a norte de Cataluña. La etapa final y que mostrará quién es la pareja ganadora coronándose en el Valle de Arán no llegará hasta el día 28 de octubre, momento en que se estrenarán en la plataforma 3Cat los dos últimos capítulos.
Antes, sin embargo, los espectadores han podido ver los primeros nueve capítulos de la temporada, los tres últimos se estrenaron este jueves 23 de octubre. El viaje comenzó en la Bahía de los Alfaques, en las Tierras del Ebro, donde los espectadores vieron la dureza de este reto, con las primeras expulsiones, etapas complicadas y problemas para los participantes, de hecho, Mireia sufrió una hipotermia y fue atendida por los servicios médicos de La Travessa. ¿Cómo ha continuado el programa y cuál es la situación actual de los concursantes antes de descubrir quién es la pareja ganadora?
Juegos de estrategia y mucha fuerza mental
El tercer capítulo terminó con la prueba de eliminación en la que Pau y Litus e Isaac y Neus se jugaron la continuación con una prueba de mover sacos. Quien sacara más sacos del color de su equipo en 15 minutos ganaba. No fue hasta el cuarto capítulo, el Horizonte, que se pudo saber el resultado.
Pau y Litus lograron salvarse, dando inicio a una nueva etapa en la presa del Pantano de Ribarroja. Aquí, la ruta comenzaba con un dilema, comenzar a caminar con el mapa o buscar unas cajas en el agua con premios. El camino consistía en bordear el río hasta el embarcadero, tomar el kayak y remontar el embalse hasta el antiguo pueblo de Faià. Como era de esperar, el programa no se lo pondría nada fácil. Allí tenían que subir al castillo de Faió y cruzar el río con una tirolina. El problema de todo esto es que esperar uno a uno para poder cruzar les haría perder tiempo en su contador particular.
Los árboles frutales del Segrià, protagonistas de la etapa
El camino continuaba hacia el mirador del Ebro, donde les esperaba la presentadora, en una subida muy fuerte y dura donde se ha visto sufrir mucho a las parejas. De hecho, Cris y Josep han sufrido una pequeña crisis por las fricciones y las tensiones acumuladas de los últimos días. Los primeros en llegar habían sido Dani y Damià, pero la penalización de Litus y Pau les ha hecho bajar posiciones. En el juego de beneficio, por lo tanto, compitieron Victor y Alicia contra Josep y Cris, en un juego mental. La segunda pareja logró hacerse con la recompensa. La etapa del día siguiente comenzaba en Torres de Segre. Allí debían buscar entre las hileras de árboles frutales las banderolas con los mapas para seguir la ruta. Una vez los obtenían debían llegar hasta el antiguo pueblo ibérico de Genó, continuando la ruta hasta el canal y hasta encontrar el siguiente mapa en una plantación de árboles frutales.
Para hacerlo debían unir dos cuerdas entre árboles con un trozo de tela del color de la pareja y en el punto en que se crea la X, allí tenían enterrada la caja con su mapa. La ruta continuaba por un camino de 4,5 kilómetros siguiendo el canal de Seròs y bordeando el pantano de Utxesa hasta el círculo amarillo donde les esperaba la presentadora. Las ganadoras han sido Ona y Sandra, que habían sido algo criticadas por el uso particular del criptex -podían restarse minutos y así escalar posiciones en la clasificación-.
La prueba de eliminación, ubicada en Alcarràs, enfrentó a Martina y Raül contra Pau y Litus en la que debían encontrar 33 cajas -donde se pueden guardar 18 kg de fruta-, escondidas dentro de una enorme estructura de cajas. El resultado de la prueba, sin embargo, eliminó a la pareja formada por Martina y Raül.
Una torre de defensa y una prueba de eliminación por equipos
El quinto capítulo de La Travessa, titulado La elección, ha llevado a las parejas a La Baronía de Sant Oïsme, en la Noguera. Allí empezaron la etapa desde la torre de defensa, donde un miembro de la pareja daba indicaciones para encontrar el mapa con la ruta. El dilema, en esta ocasión, se encontraba dentro de la ruta, en la que había dos caminos que podían decidir, si elegían el correcto, podían ahorrarse 30 minutos. Por suerte, todos escogieron las opciones correctas. En el Pantano de Camarasa les esperaba un dilema de la presentadora, antes de continuar la ruta de 10 kilómetros con bicicleta hasta el final de etapa que ganaron Dani y Damià, dos potenciales ganadores.
La parte más tensa es que la prueba de eliminación y la de beneficio la jugaron de manera conjunta. ¿Qué significa esto? Dani y Damià, que debían competir por una recompensa con Ona y Sandra, tuvieron que hacer equipo con una pareja que jugaría la eliminación. Ellos eligieron a Maria y Cris, y Ona y Sandra fueron con Victor y Alicia. En Pantano de Terradets debían hacer una carrera de relevos memorizando un mensaje que debían ir pasando. El último aventurero debía resolver la cadena, formada por imágenes y colores, y colocarla en un panel en el orden correcto. Fue en el sexto capítulo cuando se resolvió el enigma de la prueba por equipos.
Victor y Alicia fueron la pareja eliminada, una de las despedidas más emotivas de la temporada porque todos los aventureros coincidieron en que eran una muy buena pareja y que su competición era muy sana. Incluso Laura Escanes no pudo ocultar las lágrimas al comunicarles el resultado final viendo la reacción de Alicia, muy emocionada por tener que despedirse de la experiencia.
Una etapa con meteorología muy complicada y accidentes
La gran protagonista del sexto capítulo fue la lluvia. La etapa comenzó con una meteorología muy complicada para los concursantes. Desde Talarn, en el Pallars Jussà, recibieron una noticia complicada: la etapa se haría en solitario. Las parejas se separarían entre aquellos que hacían la ruta caminando y los que la hacían en bicicleta. La única pareja que pudo mantenerse unida fueron Dani y Damià, que como vencedores de la prueba por equipos y de beneficio, eligieron la bici e ir los dos juntos. Ahora bien, las carreteras mojadas por la lluvia provocaron que Dani tuviera un accidente cuando estaba pedaleando por una zona con baches. Nada más caer de la bici vio como tenía heridas profundas en las manos y el equipo médico tuvo que atenderle, deteniendo su contador.
La segunda parte de la etapa, una vez llegaban al pueblo de Salàs de Pallars, debían encontrar entre las tiendas-museo ambientadas en los años 70, objetos modernos que les sirvieran para formar un mensaje. La ruta seguía dirección al pantano, pero para llegar al mapa con el camino, necesitaban cruzar al otro lado del pantano con el kayak. Aquí Pau y Litus tenían cierta ventaja porque conocían la zona. El último tramo consistía en bordear el pantano por un camino de 3 km lleno de barro hasta el círculo amarillo donde les esperaba la presentadora.
La prueba de eliminación hace tambalear a las parejas
El conflicto, sin embargo, no terminaba aquí. Las últimas cuatro personas que habían llegado al círculo eran las que se someterían a la eliminación, porque el veredicto de la prueba era individual. Josep, Sandra y las dos Cris debían superar una prueba nocturna en la Pobla de Segur siguiendo la tradición de las fallas. ¿Qué debían hacer? Subir la cima, buscar la tea para encender el fallaire y una vez lo tengan, volver a la cima y entrar dentro del círculo amarillo. El problema es que Josep y Cris eran pareja dentro del concurso, pero si uno de ellos no superaba la prueba, su pareja se podía romper. En el séptimo capítulo se ha podido ver que los vencedores fueron Josep y Sandra, por lo tanto, las dos Cris quedaron fuera y ahora hay la oportunidad de crear una nueva pareja: Josep y Maria, la pareja de Cris que también se ha quedado sola.
La etapa más larga de la historia de ‘La Travessa’
El séptimo capítulo de La Travessa ha llevado a los concursantes al límite. La nueva tanda de capítulos disponibles en la plataforma 3Cat antes del estreno de los dos episodios finales se adentra en la cuenta atrás para conocer a la pareja ganadora, pero antes, los aventureros han tenido que adentrarse por los Pirineos en la etapa más larga de la historia del concurso. La ruta comenzó en el Congosto de Collegats y para encontrar el mapa debían cruzar el río dentro de una cesta colgada de un cable. Ahora bien, la prueba fue más accidentada de lo que esperaban. Las indicaciones de los responsables eran claras, no agarrarse al cable, solo a la cuerda, pero Maria, en un descuido, se enganchó la mano con una de las ruedas de la gavineta.
El equipo médico de La Travessa se la llevó al hospital más cercano porque la herida era más grave de lo que pensaban, al tiempo que los compañeros continuaban con la prueba y su nuevo compañero, Josep, hacía la prueba solo. Más tarde, las buenas noticias llegaron porque Maria pudo reincorporarse. Los primeros tres kilómetros de ruta iban por el congosto, hasta que comenzó el tramo de subida de 7 kilómetros donde podían encontrar el siguiente mapa. Las parejas, sin embargo, tenían rutas diferentes para llegar a diversas poblaciones, con tramos muy duros y de gran exigencia, bien 20 kilómetros cada uno de caminos de montaña llenos de barro. Cada pareja se detendría, sin embargo, en un lugar diferente para pasar la noche antes de continuar la etapa al día siguiente.
Las condiciones han sido muy duras en este episodio. Buena parte de los concursantes estaban enfermos, con fiebre y sufriendo las consecuencias de tantos días caminando bajo condiciones extremas, empapados y con cambios de temperatura. Todas cuatro parejas superaron la etapa, una de las más duras de toda la historia del programa, pero ¿quién se llevó la victoria en esta ruta?
Traiciones y beneficios
El octavo capítulo continuó con el resultado de la etapa anterior. El dilema que les había propuesto Laura Escanes era la posibilidad de elegir si la etapa sería de beneficio o de eliminación si ninguna pareja traicionaba a sus compañeros. Por una vez, decidieron hacer equipo y elegir la etapa de beneficio. Los ganadores de la etapa, Dani y Damià, se enfrentaban a Ona y Sandra en una prueba durísima que les hizo sufrir muchísimo: una carrera por el Pantano de Sallent que superaron in extremis Dani y Damià. ¿El gran beneficio? Poder descansar un día entero y saltarse la etapa que harían sus compañeros. A medida que avanzaban los días, las lesiones y las enfermedades han sido una constante entre los aventureros. Las otras tres parejas tuvieron que comenzar la ruta por un camino de bosques y senderos hasta llegar a Sopeira, en la Alta Ribagorça. Allí, Josep y Maria y Litus y Pau tuvieron que jugarse la continuidad en La Travessa con una prueba en el Pantano de Escales. El reto era extremo: una carrera con los kayaks, subir hasta la cima de la presa, bajar por unas escaleras excavadas en la roca y pedalear hasta el final. De aquí salieron los primeros semifinalistas: Josep y Maria, Dani y Damià, y Ona y Sandra.
Una prueba eliminatoria para llegar a la gran final de ‘La Travessa’
Se acerca el final de La Travessa y el capítulo nueve es un claro ejemplo del cambio del paisaje. Desde el inicio en la Bahía de los Alfaques los aventureros se han trasladado a la nieve del Valle de Arán, pero antes, debían superar la primera etapa de la prueba eliminatoria repartida en dos días. Solo quedan tres parejas que están a un paso de la final. La etapa, sin cartas de beneficio ni penalización, comenzó en el pueblo de Pont de Suert, desde donde debían superar un juego para obtener el mapa y comenzar la ruta. La etapa prometía ser extrema, con un camino hasta la cima de la montaña a las afueras del pueblo y una vía ferrata complicadísima que mostró el peor carácter de los concursantes: estrategias para retrasar a los compañeros y la insistencia de dos concursantes para adelantar a los demás y no quedarse las últimas. Una vez superado, el siguiente mapa los llevaba de bajada hacia el pueblo con 15 km de desnivel pedaleando con la bicicleta por caminos complicados. El camino debía conducirlos a la Iglesia de Santa Eulalia de Erill la Vall, donde estaba el mapa que los llevaría hasta Sant Quirc de Taüll.
El equipo médico comunica una decisión muy dura para una pareja
Al día siguiente les esperaba la prueba más exigente desde la estación de esquí de Boí de Taüll, pero una de las parejas no podría continuar su camino. Después de evaluar las lesiones, Laura Escanes les comunicó la decisión del equipo: Sandra no podía continuar por seguridad y, por lo tanto, ella y Ona debían abandonar el concurso cuando estaban a punto de ser finalistas.
Por esta baja, La Travessa recuperó a los últimos eliminados, Pau y Litus, que se enfrentaron a los semifinalistas en una prueba de alto impacto: un recorrido alrededor de la estación hasta subir al pico de la montaña, conseguir los esquís y volver a bajar hasta el círculo amarillo, que decidiría las dos parejas finalistas. ¿Quién lo logrará? El concurso mantiene la incógnita hasta el día 28 de octubre, momento en el que se publicarán los capítulos que quedan en la plataforma 3Cat y se descubrirá la pareja ganadora de la tercera temporada.
