No ha sido una semana fácil, sobre todo porque el apagón general condicionó las parrillas televisivas. Los protagonistas de Com si fos ahir, la serie que diariamente lidera los mediodías de TV3, también sufrieron las consecuencias, viendo cómo las programaciones afectaban la emisión de los capítulos. Ahora bien, los espectadores no deben preocuparse más porque parece que la tranquilidad se ha instalado de nuevo. O mejor dicho, la normalidad que caracteriza esta ficción. Han sido días de rupturas, confesiones, travesuras y secretos, que en este episodio del viernes pueden acabar de trastocar aún más las relaciones de los protagonistas. La traición de Sílvia (Montse Germán) ha salido a la luz, las socias de la Barnateca continúan bajo el encanto seductor de Eugeni (Oriol Vila) y Marta (Sílvia Bel) ha conseguido vengarse de Esteve.
Sílvia ha confesado la identidad de Pacman
Hacía días que los guionistas de Comsi habían dejado caer algunas pistas con cuentagotas sobre esta trama tan candente. La aventura de Sílvia con Pacman, es decir, con Miqui (Adrià Collado), el cuñado de su novio, se convirtió en el secreto mejor guardado de la serie. Aunque Francesc (Eduard Buch) descubrió que su pareja se había liado con alguien, perdonó la infidelidad sin saber quién había sido el responsable. Bien, el equipo de la serie catalana ha decidido que era un buen momento para hacer estallar esta bomba.

Después de las investigaciones de Francesc y las sospechas cada vez más grandes, el hombre ha descubierto por fin con quién se acostó Sílvia. En el segundo capítulo del miércoles 30 de abril, la mujer, desesperada, le confesó que Pacman era Miqui. Por la cara que puso Francesc no parece que esté muy contento con la noticia. Además de haber ocultado la mentira durante tantos meses, su hermana, Neus (Mercè Martínez) tampoco sabe todo lo que ha pasado entre ellos dos. Un lío enorme por culpa de una pasión temporal entre dos personajes con ganas de jugar a hacer manitas.

En este capítulo del viernes, Sílvia intentará buscar el perdón de su pareja, asegurándole que su historia con Miqui forma parte del pasado. El hombre está muy decepcionado por lo que ha hecho, han construido una relación a partir de una mentira y enterarse así, después de sus investigaciones, no es nada bonito. Sílvia le explica que cuando chateaban y se enviaban mensajes picantes, no sabía quién era Pacman. Aun así, no es una justificación porque cuando se acostaron ya sabía que Miqui era el cuñado de Francesc. Los espectadores saben que esta relación no se quedará así después de esta confesión.

Miqui también sufre las consecuencias de esta noche de pasión. Aunque los términos con su esposa son más flexibles, porque tienen una relación abierta y permiten algunas aventuras esporádicas, haberse acostado con la novia de su cuñado también podría tambalear su relación. Francesc le reprocha que haya engañado a su esposa con su pareja, y sobre todo está dolido porque además son amigos y se han ayudado mucho entre ambos. Para intentar dar un golpe de mano a Sílvia, le pide que no rompa con ella porque la destrozará.

Más tarde, cuando Sílvia regresa a casa, encuentra a Francesc haciendo las maletas. Él le explica que no le dirá nada a Neus porque no quiere que pase por la misma situación que él. Le pide por favor que reconsidere las cosas y en una escena casi desesperada, él acaba aceptando su perdón, «porque la quiere demasiado para dejarla». Parece que el amor se interpone a los cuernos.

Las socias de la Barnateca continúan la juerga
Otra de las tramas más candentes de los últimos capítulos es la aparición de un nuevo seductor. Si alguien creía que no habría nadie que pudiera superar los encantos italianos de Salvatore, no estaban preparados para la llegada de Eugeni. Este hombre se presentó en la Barnateca dispuesto a trastocar la vida de dos amigas. Gemma (Àurea Márquez) y Cristina (Carlota Olcina) son compañeras de trabajo, amigas y ahora las víctimas de la seducción de un empresario.

Cristina logró adelantarse con su valentía y actitud descarada, visitando el hotel y liándose con Eugeni. Su complicidad era más que evidente y Gemma nota que hay algo extraño. Haciendo preguntas para extraer alguna información, parece que pronto atará cabos. Antes, sin embargo, intentará avanzar en su aventura. En este capítulo de final de semana, se ha reunido con Eugeni para gestionar su nueva asociación. El problema, sin embargo, es que Gemma tiene unas intenciones diferentes más allá del contrato con Itzíar (Mar Ulldemolins). Su encuentro profesional parece que será muy picante porque antes de quedar con él, ha ido de compras con Gina (Meritxell Huertas) y Eva (Alícia González Laá) y se ha llevado todo un lote de lencería de encaje. Lo que no sabe es que su amiga ha quedado con Eugeni en el hotel. Cuando están todos juntos, ven que Gemma les ha comenzado a llamar y enviar mensajes.

Más tarde, cuando ambos quedan en la Barnateca, Gemma pone en marcha su estrategia. Después de hablar de Itzíar, la socia del local de catering le propone irse a algún otro lugar para continuar la charla. Lo que pasa después es brutal porque el hombre la rechaza, tan cordialmente como puede, pero la deja con un palmo de narices. ¿Acabará descubriendo la aventura secreta de su socia? Por ahora, los fieles espectadores de la serie de TV3 tienen unos días para reflexionar sobre todo lo que ha pasado en esta semana tan convulsa y atípica.