La Policía Local de Salt ha detenido este sábado a la una y media de la madrugada tres personas por atentado contra los agentes de la autoridad y ha identificado siete más por insultos y amenazas. Todo ello se ha producido después de que una veintena de personas hayan accedido por la fuerza a la comisaría conjunta de los Mossos y el cuerpo municipal de la población gerundense. Según ha informado el ACN, los hechos han empezado cuando los Mossos ha llevado hasta las dependencias policiales una persona para comprobar la autenticidad de su pasaporte. Poco después, unas veinte personas han entrado por la fuerza a la comisaría con el objetivo de sacarlo. Durante los disturbios —que no han dejado ningún herido— se han producido empujones, agresiones e insultos. Los cuerpos policiales han echado los jóvenes y han cerrado la comisaría.
El incidente, según han informado varios medios, se ha producido después de que uno de los acompañantes del primero detenido ha podido avisar otras personas de donde lo tenían retenido para verificar el pasaporte. A partir de entonces esta veintena de personas se ha empezado a congregar en los alrededores de la comisaría que ha acabado con el asalto después de que aprovecharan que la puerta del establecimiento se ha abierto para entrar en tromba sin que los policías del interior pudieran hacer nada. Durante la confrontación, ha habido varios momentos de tensión con insultos, empujones y, finalmente, la detención de estas tres personas.
Intento de robo a un coche de los Mossos
Este conflicto a Salt no es el único que ha implicado los Mossos en las últimas semanas, puesto que el pasado 21 de septiembre, uno ladrona probó de asaltar un coche de Mossos. Este episodio empezó cuando el ladrón en cuestión intentó abrir un coche patrulla de los Mossos d’Esquadra en la calle de los Carders del Borne. En el video, colgado por una patrulla ciudadana en Instagram, se ve como el hombre consigue abrir la puerta y que acaba parando su acción.
El ladrón aprovechó que los agentes de los Mossos d’Esquadra habían bajado rápidamente del coche para atender un aviso de un robo con violencia. Los agentes, al salir deprisa y corriendo del vehículo, dejaron la ventana del vehículo abierta, un hecho que el ladrón intentó aprovechar para sustraer artículos del interior del coche patrulla, los agentes, pero lo interceptaron antes de que pudiera robar nada.
