Nuria Busquet, licenciada en traducción al catalán, ha relatado en un hilo viral en su cuenta de X (antes Twitter) la yincana que le están obligando a hacer para conseguir el certificado de C1 de catalán que le piden, según explica sin entrar en detalles, por «circunstancias de la vida» y que todavía no ha podido resolver positivamente todo y llevar meses intentando conseguirlo.

En un primer momento, Busquet se pensó que tendría bastante con el justificante del título universitario, pero la sorpresa llegó al jefe de un mes cuando recibió el mensaje en el cual le dicen que «el título no es válido porque no especifica que era de traducción al catalán«. Aun así, no se desesperó y envió la cara trasera del título universitario en cuestión, donde lo indica, pero otro mes más tarde le volvieron a decir que no era válido y que le hacía falta lo C1 de catalán, «the one and only«.

Después de este primer intento en dos actas, la traductora contacta con una funcionaria, «que solo coge llamadas de 12 a 14», y le recomienda que vaya con el título de traducción a un instituto y que allá le expedirán el certificado. «Voy al instituto de mis hijos la semana pasada y la secretaria está de baja. Dejo los papeles y les pido que me truquen cuando lo tengan», relata.

La secretaria del instituto de sus hijos le trucó este lunes y le dijo que para hacerle el certificado le hacía falta el título de ESO y Bachillerato «de hace treinta años». Después de todo este periplo arriba y abajo, este martes se acerca a su instituto a pedir el título de BUP y allá le dicen que tiene que ir a su escuela de primaria y pedir el título de EGB, «para poder hacerme el título de BUP, para poder certificar que mi licenciatura es equivalente al C2 de catalán».

Además, la traductora explica que su escuela «cerró hace años» y entonces se presenta en el centro educativo donde, segundos le dicen, conservan «los documentos de hace cuarenta años» y una vez allá le dicen que «la secretaria está de baja! Que vuelva a pasar». «Mirad, yo esto lo considero un maltrato al ciudadano y no sé cómo ayuda el país y el idioma, la verdad. Pero que sabré yo, que hice EGB, BUP y COU. Adelante con el programa», lamenta.

Indefensión ante la burocracia

Aun así, Busquet deja claro que ella en ningún momento se queja de que le pidan lo C1 de catalán, sino que quiere denunciar «la indefensión que sientes ante tanta burocracia y la manera de gestionarlo». En este sentido, destaca que «los principales afectados» son los mismos funcionarios porque «tienen que aguantar el mal humor de la gente a quien han hecho perder el tiempo, cuando ellos hacen simplemente el que se los pide». «Nadie se responsabiliza del desbarajuste administrativo y bien que hay responsables que cobran para serlo…», concluye para dejar clara su denuncia.

Más noticias
Notícia: Amaia Romero sorprende con un talento oculto relacionado con los peces
Comparte
La cantante saca a la luz que, curiosamente, conoce muy bien los diferentes tipos de especies
Notícia: Empate entre PSOE y PP en plena negociación por la amnistía, según el CIS
Comparte
Los populares recortan distancia con los socialistas, que solo tendrían una ventaja de cuatro décimas
Notícia: Biden aterriza en Israel y culpa al «otro bando» del ataque al hospital de Gaza
Comparte
La Unión Europea y el Reino Unido son más prudentes y piden una investigación a fondo del bombardeo
Notícia: Chenoa reacciona a las palabras de David Bisbal sobre su ruptura
Comparte
El cantante habla sobre esta separación 18 años después en un documental sobre su vida

Comparte

Icona de pantalla completa