La consejera de Educación, Esther Niubó, encara la legislatura con un objetivo muy claro: mejorar el funcionamiento de la preinscripción, el proceso de asignación de plazas y la matriculación de los ciclos de formación profesional (FP). Para mitigar los problemas que se han vivido durante este verano y el inicio de curso de este año -los cuales se originan durante el mandato de la exconsejera Anna Simó-, la nueva titular del área marca como «gran prioridad» para el próximo año recortar el calendario de preinscripción en la FP para garantizar que todos los estudiantes puedan matricularse antes del mes de agosto. Concretamente, Niubó detalla que la oferta inicial de los ciclos medios y superiores se hará pública a finales de mayo del próximo año y el «proceso de gestión de plazas», es decir, el proceso de asignación -después de la última repesca extraordinaria-, finalizará a principios de septiembre. De esta manera, el nuevo calendario permitiría comenzar el curso con todos los estudiantes asignados o matriculados -a diferencia del curso vigente.
Para mejorar el funcionamiento de la preinscripción, la responsable del área considera que es clave, también, «evitar la reserva de plazas de los centros para el alumnado repetidor y que este se matricule antes de la primera asignación», lo que permitiría crear una lista «real» de las plazas que dispone el sistema educativo: «No es que no se reserven las plazas, sino que se hace una vez se tiene en cuenta todas las plazas de las que dispone el sistema», argumenta la jefa del departamento. Además, también destaca la importancia de mantener el proceso de asignación extraordinario, pero cree que es fundamental llevarlo a cabo antes del inicio del curso escolar. El sistema de asignación, entonces, se mantiene igual que el del curso actual -es decir, a través de nota-, pero el calendario se modificará para resolver las problemáticas.

Reorganizar la oferta de FP
En esta misma línea, para resolver el desbarajuste de la FP, la titular de Educación también asegura que trabajará para «reorganizar» el entramado de ciclos medios y superiores para adaptar la oferta a la demanda de los estudiantes. Según detalla, esta reestructuración se llevará a cabo en relación con las necesidades de los alumnos, pero también de las empresas de los diversos sectores: «Analizaremos la posibilidad de crear nuevos convenios de colaboración», apunta. Uno de los grandes problemas en el funcionamiento del entramado de FP es la movilidad, ya que no todos los territorios disponen de la misma oferta. En esta línea, la consejera apunta que «estamos trabajando con diversas propuestas para resolverlo», pero asegura que estas propuestas dependen del entendimiento entre formaciones políticas para los presupuestos.
Para paliar el abandono escolar, especialmente entre los jóvenes que salen del sistema educativo una vez finalizada la educación secundaria obligatoria, consideran que es fundamental potenciar la figura de los orientadores educativos. Así pues, la consejería apuesta por reorganizar el calendario de preinscripción de la FP y potenciar la orientación para hacer frente a las deficiencias enquistadas del sector.