Este lunes, el equipo de defensa de Carles Puigdemont y Toni Comín presentó sendos escritos de recusación contra tres magistrados del Tribunal Constitucional. Una petición antes del debate sobre la admisión a trámite de su recurso de amparo por la negativa del Tribunal Supremo a aplicarles la amnistía. El abogado del exilio, Gonzalo Boye, intenta apartar a Concepción Espejel, Enrique Arnaldo y José Maria Macías por su clara animadversión no solo contra el Procés sino contra el presidente y el conseller en el exilio.

De hecho, Macías ya fue apartado, recusado por la fiscalía, en el recurso de inconstitucionalidad contra la ley de amnistía, tanto por sus declaraciones contra la ley como por haber firmado un informe contra la ley del olvido penal para el independentismo cuando era miembro del Consejo General del Poder Judicial. Fuentes del TC aseguran que la recusación retrasará al menos un mes el debate de admisión del recurso y de las medidas cautelares solicitadas. Las recusaciones afectarán tanto a Puigdemont y Comín como al conseller de Cultura en el exilio, Lluís Puig, porque según los magistrados los tres recursos tienen el mismo vínculo y justificación. De hecho, esta misma mañana, en la reunión plenaria, ya se han designado los ponentes para las recusaciones.

Plenari del Tribunal Constitucional/ Nacho Frade / Europa Press
Pleno del Tribunal Constitucional/ Nacho Frade / Europa Press

Rechazar las medidas cautelarísimas

Todo indicaba, según el orden del día del TC, que este martes los magistrados admitirían a trámite los recursos pero que se rechazarían las medidas cautelarísimas -sin escuchar la opinión del ministerio fiscal- solicitadas por el exilio, con lo que reclamaban levantar las órdenes estatales de detención, de manera que se permitiría el retorno del exilio a Cataluña sin riesgo de ser detenidos. La idea de los magistrados era abrir una pieza separada sobre las medidas cautelares y comenzar el debate de manera inmediata.

Ahora, las recusaciones obligan a posponer la admisión del recurso al menos un mes. Una vez se decida sobre las recusaciones, continuará el debate de las medidas cautelares, aunque el TC duda que se acepte apartar a los magistrados por entender que las recusaciones son «extemporáneas». En todo caso, en el TC no esconden cierta perplejidad por la presentación de las recusaciones, trámite que alarga la decisión sobre la amnistía, aunque permite acercar la decisión del tribunal a la respuesta del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) a las cuestiones prejudiciales sobre la ley de amnistía.

Comparte

Icona de pantalla completa