ERC ha advertido al PSC que no tiene suficiente con los últimos «gestos» del Gobierno sobre el traspaso de Rodalies y la nueva financiación y ha cerrado definitivamente la puerta a negociar los presupuestos de 2025. La secretaria general del partido, Elisenda Alamany, ha asumido que para ese 2025 será “inviable que esté lista la soberanía fiscal” y, por lo tanto, ha dado por hecho que la Generalitat trabajará con los presupuestos prorrogados durante todo el año. “El PSC también ha asumido que en 2025 no lo tendrán preparado, que no tienen otros apoyos y que irán a prórroga”, ha dicho Alamany en una entrevista en Catalunya Ràdio.
“Donde somos más útiles es haciendo valer nuestros votos y fiscalizando para que en 2026 sí esté listo y cumplan los acuerdos”, ha insistido la secretaria general. ERC lleva semanas advirtiendo que “no hay negociación” sin que se hayan cumplido los acuerdos de investidura de Salvador Illa y, a pesar de los últimos intentos del Gobierno por atraer a los republicanos a la mesa de negociación, Alamany ya ha dejado claro que han llegado tarde. “Los gestos no son calendarios, son resultados”, ha remarcado. “Lo que debe haber es cumplimiento”.

La portavoz del Gobierno, Sílvia Paneque, ya dejó entrever este martes que las conversaciones con ERC no iban por buen camino. En la rueda de prensa después del Consejo Ejecutivo, Paneque prometió que el Gobierno cumplirá “hasta donde pueda” con los acuerdos de investidura con ERC y Comuns aunque no haya presupuestos. “No abdicaremos de gobernar”. Con todo, el ejecutivo de Salvador Illa no tiene un “calendario límite” para negociar los presupuestos de 2025 y esperará a finales de mes, cuando la consejera de Economía, Alícia Romero, termine la ronda de contactos con partidos y agentes sociales, para valorar si renuncia a buscar apoyos para aprobarlos.
Del traspaso de la R1 al calendario de la financiación
Esta semana el Gobierno ha hecho varios gestos para intentar un acercamiento con ERC. El martes activó el traspaso de Rodalies con el inicio de los trámites para asumir la gestión del tramo de la R1 entre la Sagrera y Maçanet. Un gesto simbólico que aún depende del gobierno español —que debe excluir la línea de la red de interés general— y que no ha ido acompañado de un calendario concreto para materializar el traspaso del resto de líneas. Tras el anuncio, Junqueras calificó de “positivo” este primer paso, pero ya advirtió que “no cambia” la postura de ERC.
Un día más tarde, la Generalitat anunció que la comisión bilateral con el Estado para abordar los traspasos de competencias y sentar las bases de la nueva financiación singular se celebrará el 24 de febrero en Barcelona. A la reunión asistirán el consejero de la Presidencia, Albert Dalmau, y el ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres. Los socialistas han reactivado cuatro comisiones bilaterales que se reunirán en la segunda mitad de febrero, tal como lo pactaron Salvador Illa y Pedro Sánchez durante la visita del presidente catalán a la Moncloa.