PSC, Esquerra Republicana, Comuns y la CUP han forzado la suspensión del pleno del Parlamento, que debía reanudarse este jueves a las 9 horas, como muestra de solidaridad con las detenciones de los activistas que se embarcaron en la Global Sumud Flotilla. La decisión se ha tomado después de que la Flotilla fuese interceptada ayer por la noche por el ejército de Israel cuando se dirigía a Gaza para llevar ayuda humanitaria. El acuerdo se ha tomado en la Junta de Portavoces y los cuatro grupos de izquierdas, que son quienes han hecho la petición, han votado a favor. En cambio, Junts per Catalunya, PPC, Vox y Aliança Catalana han votado en contra. Entre los integrantes de la Flotilla, está Pilar Castillejo, presidenta del grupo parlamentario de la CUP, y que también se encuentra retenida por las autoridades israelíes.
Además, la Junta de Portavoces ha aprobado una declaración en solidaridad con la Flotilla y de condena por lo que está pasando en Gaza. Sin embargo, este texto no se podrá leer en el pleno porque no cuenta con el apoyo de una mayoría cualificada. Junts per Catalunya, PPC, Vox y Aliança no han apoyado el texto. Antes de la reunión de la Junta de Portavoces, se ha reunido la Mesa del Parlamento, que ha pedido la liberación de Castillejo. También se ha acordado que esta mañana, a las 11h, se celebrará un minuto de silencio frente a la fachada del Parlamento en apoyo de los miembros de la Flotilla.
El texto de la propuesta de acuerdo acordada reclama que se dé “máxima atención y agilidad diplomática para que sea liberada la representante del pueblo de Cataluña y se garanticen los derechos, la seguridad y la integridad física de la diputada”. Asimismo, la cámara catalana expresa su preocupación por la situación de la líder de los anticapitalistas en el Parlamento, y también por la del resto de ciudadanos “que formaban parte de esta iniciativa de la sociedad civil, pacífica y humanitaria”.

Un minuto de silencio con polémica en el Parlamento
De hecho, las diferencias entre los grupos parlamentarios ya se hicieron evidentes con el minuto de silencio que se hizo el martes “como muestra de rechazo y condena ante el genocidio y los ataques perpetrados contra la población civil en Gaza, así como de cualquier acción que vulnere la Convención de Ginebra y el derecho internacional humanitario”, una acción que no estuvo exenta de polémica y reproches entre los grupos parlamentarios. Todos los grupos participaron a excepción de Vox y Aliança Catalana, que se ausentaron del hemiciclo después de denunciar las tesis de “la islamizquierda”. El PP, por su parte, evidenció su oposición al texto pactado por los cuatro grupos de izquierda, pero respetó el minuto. Junts per Catalunya, por su parte, dejó claro que apoyaban el texto, pero no lo quisieron firmar porque no se aceptaron sus enmiendas. “Estamos con la vida, con los derechos humanos, por el fin de la barbarie, de los genocidios y también por el fin del terrorismo”, defendió la portavoz de Junts, Mònica Sales.
Por su parte, el presidente del grupo parlamentario socialista, Ferran Pedret, recordó que se condenaron los ataques del 7 de octubre perpetrados por Hamás, y criticó la falta de empatía de los grupos ausentes en el minuto de silencio. También hubo críticas por parte de ERC, la portavoz Ester Capella lamentó que, a pesar de hacer un debate en una Junta de Portavoces previa, grupos parlamentarios aprovecharan el minuto de silencio para manifestar su oposición sobre esto. “Los que se han ido han demostrado la calidad moral”, sentenció David Cid, de los Comuns. Finalmente, el diputado de la CUP Dani Cornellà lamentó que “la extrema derecha sionista” se marchara del hemiciclo sin condenar el “genocidio” en Gaza.