El primer secretario del PSC y posible futuro presidente de la Generalitat, Salvador Illa, ha abierto la puerta a «mejorar la financiación» de Cataluña y se ha mostrado convencido que el gobierno español, encabezado por el también socialista Pedro Sánchez, «ayudará en esta tarea»: «Sabemos que el gobierno de España tiene voluntad de escucharnos porque quiere dar una respuesta a la singularidad de Cataluña y a la pluralidad de España. Pero necesitamos un Gobierno para ponernos manos a la obra». Así lo ha afirmado el líder del PSC este sábado durante la 15.ª Asamblea de Federación del PSC del Baix Llobregat, que se celebra en Gavà, donde también ha querido dejar claro que mejorar la situación económica del país «es una cuestión de justicia»: «Cataluña no puede ser la tercera al aportar recursos y la decimocuarta a recibir», ha remachado.
A pesar de que el dirigente socialista ha centrado su intervención en la financiación y al garantizar la buena fe del ejecutivo de Sánchez para mejorar esta problemática, Salvador Illa también ha querido alejarse un poco de la figura del presidente español y ha apuntado que el liderazgo de la nueva etapa «se decidirá en Cataluña y desde Cataluña, sin mezclar carpetas». Así mismo, ha asegurado que mantendrá sus compromisos «de no explorar ninguna vía alternativa» que no sea una mayoría progresista para configurar un gobierno en Cataluña, después de las elecciones catalanas: «La única opción que exploraremos es la de un Gobierno progresista, la mayoría progresista, a la cual los catalanes apoyaron el pasado 12 de mayo», ha aseverado el líder socialista.
Desencallar la gobernabilidad catalana
Después de la victoria del 12-M que ha generado un Parlamento con gran representación socialista -a pesar de que no suficiente para conseguir la mayoría sin ningún apoyo-, Salvador Illa tiene que intentar encontrar aliados para poder convertirse en el nuevo presidente de la Generalitat. Este mismo sábado, los republicanos han fijado en su Consejo Nacional la «financiación singular» como la clave para negociar una posible investidura del dirigente socialista, una cuestión que hay que negociar con el gobierno español.
