El consejero de Interior, Joan Ignasi Elena, ha cargado con dureza contra el secretario general de Junts, Jordi Turull, por las polémicas declaraciones en las cuales vinculaba inmigración con multirreincidencia. “El problema es la multirreincidencia, no la inmigración”, ha espetado Elena en una entrevista en Catalunya Ràdio. “[Mezclar las dos cuestiones] no solo es un error y malo para la convivencia, sino que es mentira”.
Después del acuerdo entre PSOE y Junts para hacer un traspaso “integral” de la gestión de competencias de inmigración, Jordi Turull aseguró que la Generalitat tenía que poder decidir sobre el futuro de los delincuentes multirreincidentes. «Si se expulsa o no a multirreincidentes se tiene que poder decidir desde Cataluña. Ningún alcalde está contento de tener gente que reincida 200 veces”, afirmó Turull. El secretario general de Junts matizó que hablar de expulsiones es “empezar el debate [sobre la inmigración] por el tejado” y que el objetivo primordial de la Generalitat tiene que ser la intervención social para evitarla.
Elena ha defendido abrir un debate sobre inmigración en Cataluña, pero ha exigido no confundir a la ciudadanía con un relato que solo refuerza a la extrema derecha. El consejero de Interior ha acusado a Turull y Junts de querer dirigir de manera equivocada un “temor electoral” por el auge de Alianza Catalana de la alcaldesa de Ripoll, Sílvia Orriols. “Colocan el debate en sus términos”, lamenta. “Se tiene que hablar de seguridad y de inmigración, pero mezclar las dos cosas…”

Interior reclama una nueva reforma del Código Penal
El dirigente republicano ha recordado que solo el 0,2% de la población inmigrante que hay Cataluña está en prisión y que las tasas de reincidencia son similares que las de los nativos. “La gran mayoría de inmigrantes trabajan”, ha insistido. El problema, asegura, son personas que son “detenidas 10, 20 o 50 veces y que, a pesar de tener centenares de antecedentes, no entran en la prisión”. Elena ha explicado que el Departamento de Interior ha reclamado al gobierno español que lidere una nueva reforma del Código Penal para combatir la multirreincidencia, puesto que la de 2022 “no ha funcionado”.
Según avanza La Vanguardia, el año pasado en Barcelona 25 personas fueron detenidas por los Mossos d’Esquadra y la Guardia Urbana en 893 ocasiones, cifra que supone una media de casi 36 detenciones por cabeza, es decir, tres al mes. La mayor parte de las detenciones fueron por hurtos y robos con fuerza. Estos 25 ladrones entraron a prisión en 124 ocasiones, a pesar de que en el 80% de las ocasiones pasaron menos de dos meses.