Junts está decidido a aguantar el pulso al PSOE hasta el último momento y ha vuelto a avisar que no votará a favor del techo de déficit que el gobierno español llevará al Congreso esta semana si no hay cambios significativos en la propuesta. El pasado mes de julio, Junts ya tumbó la iniciativa y ahora están dispuestos a volverlo a hacer “si la propuesta que se presenta es la misma”, según ha explicado el secretario general del partido, Jordi Turull. “A nadie le tiene que sorprender: todo aquello que sea para consolidar el
Las relaciones de Junts y el PSOE no pasan por su mejor momento. A pesar de la desconfianza mutua, el acuerdo de investidura para hacer presidente a Pedro Sánchez había marcado un terreno de juego claro para negociar. La llegada de la oficialidad del catalán al Consejo General de la Unión Europea reafirmó la postura de los dirigentes de ambos partidos que apuestan por el entendimiento —incluso Carles Puigdemont alabó el trabajo del gobierno español en la materia—, pero en las últimas semanas la relación se ha enfriado. El fracaso de la regulación de los alquileres de temporada en el Congreso, con cambio de voto a última hora de Junts, ha vuelto a tensar las costuras del pacto. Tanto que el pasado viernes una delegación del PSOE viajó a Suiza para reunirse con Puigdemont.

La Moncloa quita hierro a las derrotas parlamentarias
El encuentro en Suiza ha permitido restablecer la comunicación, pero no ha servido para acercar posturas. El ministro de Presidencia, Félix Bolaños, ha asegurado en declaraciones a la prensa que el gobierno español “no da absolutamente nada por perdido”, pero el hecho es que pocos días antes de una votación clave como es el techo de déficit —imprescindible para aprobar unos presupuestos—, no tiene los apoyos necesarios para aprobarlo. Desde la Moncloa han empezado una campaña para sacar hierro tanto a las derrotas parlamentarias –35 esta legislatura—, como la falta de presupuestos nuevos. Si no se aprueban este año, Sánchez habrá gobernado media legislatura con los del 2023.
Turull ha avisado al PSOE que la “responsabilidad” de aprobar los presupuestos es del gobierno español, no de Junts, y ha reclamado más diálogo para poder negociar la letra pequeña. Es una crítica recurrente al ejecutivo de Pedro Sánchez, que a menudo lleva leyes en el Congreso sin tener los votos necesarios y espera que sus socios de investidura las voten con un margen mínimo de negociación. Puigdemont dijo la semana pasada que el trabajo de Junts no es “dar estabilidad ni desgastar a nadie” y que el partido decidirá su voto en cada votación en función de si el texto “defiende a Cataluña y los intereses de los catalanes” o no.
El PP carga contra el PSOE por reunirse con Puigdemont
El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha vuelto a avisar que Pedro Sánchez está al frente de una legislatura “ingobernable” y ha criticado la reunión del PSOE con Junts en Suiza. “Es todo tan demencial que el presidente que afirma sin cesar que hay legislatura para rato envía una delegación a Suiza para rogarle a Puigdemont que no la dé por acabada”, ha dicho Feijóo durante el Comité Ejecutivo del PP en Madrid. Los populares hace semanas que dan por acabada la legislatura y auguran elecciones generales para el 2025. Feijóo ha vaticinado un nuevo capítulo del “drama” parlamentario del gobierno español este jueves, cuando se tiene que votar el techo de déficit.
El ministro de Presidencia, Félix Bolaños, ha restado importancia a la reunión con Puigdemont y la ha enmarcado en el trabajo rutinario del gobierno español. “Hablamos con Junts, pero también con ERC, el PNV, con Podemos, con todas las fuerzas políticas que conforman el grupo de partidos que pueden ayudar a sacar adelante la agenda legislativa de este gobierno”. Bolaños ha dicho que las conversaciones tienen que transcurrir con “naturalidad” y ha criticado que el PP se haya negado a negociar el techo de déficit.