La justicia española y madrileña se ha puesto, para variar, del lado del falangismo en la capital del Estado español. El pasado viernes 21 por la noche, cientos de falangistas desfilaron tranquilamente por la ciudad de Madrid desde cerca de la sede del PP hasta la sede del PSOE, donde montaron el numerito final con loas al dictador Francisco Franco, al ideólogo falangista Primo de Rivera, y cantos del ‘cara al sol’. Según la Delegación del Gobierno en Madrid, 700 personas recorrieron las calles de Madrid bajo el lema ‘Contra el genocidio del 78: en defensa de nuestra nación y de nuestro pueblo’ y cargando contra la política del Estado español.
La concentración convocada por La Falange se inició a las nueve de la noche en la calle Génova número 24, una localización muy próxima a la sede del PP (Génova 13) y se desplazó por varias calles de la capital del Estado español (Sagasta, Carranza, Alberto Aguilera, Marqués de Urquijo) hasta llegar a la calle de Ferraz donde tiene la sede el PSOE. Precisamente en la sede de los socialistas es donde los falangistas montaron el numerito final realizando el saludo fascista, coreando cánticos a favor de Franco y Primo de Rivera y cantando «no es una sede, es un puticlub» y «Pedro Sánchez, hijo de puta», para terminar de redondear el espectáculo dantesco organizado.
🔴 Fin de la marcha de la FALANGE frente a la sede del PSOE en Ferraz, al canto de ‘Cara al Sol’. pic.twitter.com/u8HrY1PKKj
— La Bandera (@labanderaes) 21 de noviembre de 2025
Las togas, del lado del falangismo
La Delegación del Gobierno en Madrid desautorizó en primera instancia la concentración, pero fue el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) quien terminó autorizando la manifestación destacando que la decisión del TSJM «no es conforme a derecho» y basaba su denegación de acuerdo con una mera posibilidad futura e incierta de que se produjeran conductas contrarias a la ley de memoria democrática o al Código Penal. «Estas conjeturas no constituyen razones fundadas para restringir el derecho de reunión según la ley y la jurisprudencia», señalaron los magistrados.

