El número tres de la lista de Junts, Josep Rull, no se someterá a una investidura, porque cree firmemente en el retorno de Puigdemont. En este sentido, Rull ha asegurado que no hay otra alternativa y que no se plantea que la ley de amnistía no llegue a tiempo por las elecciones. Así, él mismo ha garantizado que «el único plan» es la investidura de Carles Puigdemont. «No hay plan B. El único plan, el A, el B y el C se llama Carles Puigdemont. Esto es el que hace que la candidatura sea tan potente e inspiradora», ha insistido.
En una entrevista al medio La Xarxa, al ser preguntado sobre si él podría aspirar a la investidura en caso de que los plazos de aplicación de la amnistía impidieran una eventual elección de Puigdemont, Rull ha reconocido que el presidente al exilio es la única respuesta. En cuanto al desarrollo de las elecciones del 12-M, el número tres de Junts ha augurado que a medida que pasen los días las encuestas dirán que el 12-M es «cosa de dos», entre Puigdemont y Salvador Illa. Así pues, según Rull, los ciudadanos tendrán que escoger entre un modelo u otro. «Entre un proyecto de ambición nacional o de resignación», ha dicho.

La unidad de los partidos independentistas
En cuanto a los pactos postelectorales, ha asegurado que la prioridad de Junts es construir un gobierno soberanista liderado por Puigdemont. Y, en este sentido, ha dicho que quieren «rehacer la unidad del independentismo«. En este sentido, Rull no ha hablado en concreto de jefe partido, pero sí que ha mencionado la necesidad de presentar el independentismo como un frente unido ante el estado español, una situación que actualmente ha quedado difuminada en las distanciaciones de los partidos soberanistas catalanes de siempre, como son ellos mismos y Esquerra Republicana de Catalunya (ERC).