Sin sorpresas entre las filas socialistas. Cómo era de esperar, el PSC vuelve a depositar la confianza en Salvador Illa para ser el candidato en las elecciones del 12-M. Así lo ha avalado este sábado la militancia durante el XV congreso del partido que se ha celebrado al Palacio de Congresos. Illa ha recibido el apoyo de la base socialista y también se ha ratificado como primer secretario, puesto que jefe otra persona se ha presentado para intentar usurparle el cargo. Así pues, después de la votación de la militancia, Isla se prepara para el pistoletazo de salida de la carrera electoral para conseguir la presidencia catalana y a diferencia del 2021 -donde ganó las elecciones-, ponerse al frente de la Generalitat.
En un mensaje a su cuenta personal de ‘X’, antiguamente conocido como Twitter, el nuevo candidato socialista se ha comprometido a «hacer realidad un nuevo futuro y abrir una nueva etapa de esperanza en Cataluña», puesto que en los últimos años el ejecutivo catalán ha estado en manos de formaciones independentistas. Durante el congreso de la formación, en su primer discurso como candidato en el cual ha mezclado el catalán y el castellano, Illa ha situado como «primera prioridad» recuperar «la excelencia» en los servicios públicos y ha mencionado cuestiones como la educación, en el punto de mira desde la bajada de las pruebas PISA, o la sanidad. Otra de las cuestiones en las cuales ha puesto especial énfasis el candidato socialista es en la sequía, que hace casi tres años que golpea Cataluña y ha llevado los embalses en niveles mínimos históricos.
Financiación, Estatuto y federalismo
El dirigente socialista comienza la carrera electoral bajo tres premisas: una nueva financiación, el Estatuto y el federalismo. En la nueva hoja de ruta que tiene que aprobar la militancia, el PSC pone el foco al conseguir un nuevo modelo de financiación propia por Cataluña, desplegar el autogobierno catalán establecido en el Estatuto, puesto que consideran que no se ha llevado a cabo correctamente, y apostar por el modelo federal, tal como han hecho en las últimas elecciones. «Somos partidarios de abordar la reforma del modelo de financiación autonómica. El PSC se implicará al mejorar la financiación de Cataluña, rehuyendo cualquier tipo de privilegio y buscando los recursos necesarios para que Cataluña pueda desarrollar todas sus potencialidades con una mejora de los recursos», apuntan en el documento.
En esta misma hoja de ruta, la formación socialista defiende un marco de convivencia «estable» con España basado en el diálogo y deja muy claro el rechazo hacia la vía unilateral porque, según consideran, «ha sido una vía conflictiva, no democrática y fruto de un encantamiento mágico artificial como suelen ser los populismos polarizadores que simplifican la realidad compleja sin hacer aportaciones constructivas sino divisivas y falaces».