El reality de Telecinco es capaz de tensar las relaciones al máximo. Los concursantes de Supervivientes llevan muchos días somitidos a situaciones extremas. Hambre, sueño, temporales, pruebas que llevan sus capacidades físicas al límite… La presión es cada vez más alta y los participantes reaccionan, a veces de manera descontrolada. Ha sido el caso del reencuentro entre Laura Cuevas y su marido, Carlos Calderón. En los últimos días, Laura Cuevas -conocida por haber vivido muchos años en Cantora y contar aspectos de la vida de Isabel Pantoja– ha sacado a la luz aspectos desconocidos de su matrimonio, después de que en la gala anterior explicara que ella había sido infiel el verano pasado.
Carlos y Laura comienzan a discutir nada más verse
— Supervivientes (@Supervivientes) April 13, 2025
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Los espectadores estaban esperando el cara a cara de la pareja, que nada más verse las caras empezaron a gritarse y protagonizar una pelea sin precedentes. Carlos Calderón, hablando con Sandra Barneda, había explicado que se «sentía decepcionado» por todo lo que decía su esposa, además de acusarla de «no hacer nada con su vida». Sin embargo, los momentos de máxima tensión se vivieron una vez se reencontraron en la playa de Cayos Cochinos. «Sigues mintiendo como una campeona, cuando llegue a España lo demostraré», le espetó al abrir la puerta de la caja que la estaba ocultando. Según ella, se habían dado un tiempo en su relación cuando ella fue infiel con otra persona, un comentario que su marido no quiso desmentir. «Que no paras de mentir en todo menos en que no haces nada con tu vida, ¿nos estábamos dando un tiempo cuando yo te pillé? Cuando llegue a España mostraré los mensajes…», le espetó.
Reproches y gritos en su cara a cara
Lejos de dejarlo estar, Laura Cuevas expuso los problemas de su matrimonio. «No tengo ganas ni de levantarme, ¡por ti! Nunca hay tiempo para mí y yo siempre esperándote. Llevo una vida de mierda», le reprochó. Un intercambio de reproches que también puso sobre la mesa una cuestión económica. Su marido la criticó porque él lleva dinero a casa para dejarle a ella, y la acusó de no hacer nada por estar siempre pendiente de que alguna televisión la llame para ir a hablar. «Me he gastado 500 euros para que su hijo vaya al instituto, antes de que fuera al concurso».
La tensión no dejó de crecer en una situación que provocó lágrimas y un abrazo entre ambos lleno de tensión antes de despedirse. «He dicho en varias ocasiones que es el amor de mi vida, pero que en los últimos años no ha sido así», aclaró ella antes de decirle adiós. Aun así, Sandra Barneda avanzó que en la gala del martes habría el puente de la concordia entre ambos, para intentar acercar posturas y arreglar la situación.
