Lolita Flores se encuentra actualmente centrada en su proyecto teatral Poncia en el Teatre Goya de Barcelona. La hija de Lola Flores se pone en la piel de una criada de Bernarda Alba, en un texto lleno de reflexiones desde la visión del personaje de Poncia. Todo el éxito que ha conseguido gracias a este proyecto, Lolita Flores no siempre ha tenido tanta suerte. En una entrevista que ha publicado la revista Lecturas esta semana, Lolita revela detalles de su economía y deudas que ha tenido en el pasado. Además, recuerda la figura de su hermano cuando han pasado treinta años de su muerte.
Lolita Flores habla de desigualdades, vivienda y problemas económicos
La revista Lecturas rescata la entrevista que concedió la artista al programa Onda Cero con Julia Otero. Partiendo de su proyecto teatral y del personaje de Poncia, la periodista ha puesto sobre las desigualdades y las injusticias. Lolita Flores admite que son temas que le duelen, sobre todo en lo que respecta a los problemas de vivienda. «Yo vivo de alquiler. Me compré un piso y lo vendí para pagar a Hacienda cuando estaba el señor Montoro (antiguo ministro de Hacienda)», explica. De hecho, apunta que en aquellos años que tenía el inmueble pagó hasta ocho millones de euros en impuestos. «No tenía nada, pero por ingresos pagaba y se me hacían inspecciones. Y como a mí, a muchos artistas de este país. Yo ahora estoy bien con Hacienda. Gracias a Dios no debo nada», explica.

Aunque admite ser partidaria de pagar impuestos, no ha podido evitar quejarse de las inspecciones que ha recibido más de una vez. «Después ese dinero que te han quitado va a otros lugares que no tienen nada que ver con los servicios públicos», expone. Su situación la llevó a vender su casa para poder pagar lo que le pedía Hacienda. «Yo vendí mi casa para pagar a Hacienda y ahora acabo de pagar un crédito que me avaló un amigo mío de mucho dinero para pagar esas inspecciones».

El recuerdo de su hermano Antonio Flores
Pocos días después de que se anunciara la muerte de Lola Flores, la familia recibía otro golpe muy duro, la muerte de su hijo, Antonio Flores. Cuando hace tres décadas de este suceso, ha sido su hija Alba Flores quien ha decidido rendirle un homenaje con el documental sobre su vida, que se estrenará el próximo 23 de septiembre en el Festival de San Sebastián. Aunque aún hay mucho secretismo hasta que se estrene el documental, Lolita ha revelado que se descubrirán cosas de las cuales la gente ha hablado mucho «sin saber». «A mí me hace mucha gracia porque parece que todo el mundo vive bajo la cama de los Flores. Saben cómo pensamos, cómo vivimos y no es así», expone.
Llevar el apellido Flores tiene ciertas ventajas y problemas. Por un lado, muchas personas los conocen por formar parte de esta saga familiar, pero también esto les resta anonimato. ¿Querría ser anónima? Explica que este verano ha estado de vacaciones en Croacia y que nadie la conocía. «Estaba feliz, me paseaba arriba y abajo en el barco en pijama. Me sentí muy bien». Sea como sea, Lolita siempre ha presumido de su familia y del legado que recibieron de su madre y su padre.