Yolanda Ramos acostumbra a hablar sin tapujos de su vida personal. No le importa dar detalles de los problemas con las parejas, de los enfrentamientos con amigos o de los diferentes contratiempos con los que pueda encontrarse. ¿Lo último de lo que ha hablado en televisión? De su primer trabajo, que era bastante estrambótico.
La actriz ha sido la invitada del Late Xou de Marc Giró, un formato nocturno y más divertido que le ha dado alas para revelar que fue trabajadora en un bingo de Barcelona. Solo era una adolescente cuando la contrataron para que entregara los cartones a la gente que entraba. ¿El problema? Que nunca había trabajado en eso y no lo hizo muy bien.
Yolanda Ramos recuerda su pasado en un bingo
Ella misma reconoce que, en aquella época, era idiota: «Yo era la imbécil del bingo y de todo el mundo de la adolescencia de los años 80«. La contrataron sin tener ningún tipo de referencia previa, claro, y cree que eso es peligrosísimo: «Me dieron una riñonera con el cambio y los cartones que tenía que vender. Y la cosa es que tenía que hacerlo rápidamente porque si no lo has vendido, el cliente se enfada».
Un día en concreto, recuerda que se puso tan nerviosa que no le cuadraron las cuentas y tuvo que acabar regalando el cambio: «No cobré los cartones a los últimos clientes… Terminé a tiempo, que era lo más importante, pero regalé un montón de cartones a todo el mundo«. Y su jefe se enfadó, claro: «Me dijeron, con muy mal gusto, que me echarían porque la gente pensaría que éramos imbéciles. Él debería haber visto que yo no estaba bien. Y creo que no era mi problema, que hagan un test de inteligencia antes de contratar. Ni siquiera me dieron la oportunidad de dimitir».

En esta última entrevista, Yolanda Ramos ha hecho gracia porque ha recuperado una historia antigua de la cual no se tenía constancia. Siempre hilarante y con ganas de hacer reír, los telespectadores se la han podido imaginar perfectamente en este lugar de trabajo.