Antonio Canales está protagonizando titulares escandalosos desde que se supo que la propietaria de su piso lo acusa de no haber pagado el alquiler de los últimos meses. El bailaor ha negado tener esta deuda desde el principio, pero la mujer está haciendo públicos documentos que confirmarían esta denuncia. ¿Entre ellos? Una conversación en la que él mismo le promete que terminará pagando lo que le debe. Para ofrecer su testimonio, ha concedido una entrevista en Y ahora Sonsoles de Antena 3 en la que ha dado su versión… con lágrimas incluidas.
«Jamás imaginé que me pasaría esto porque no soy un indigente y tampoco insolvente. El año que viene haré mi despedida con 63 años, de hecho. De todo lo que se está diciendo, solo personas que no estén muy bien de la cabeza pueden llegar a creérselo», ha dicho nada más llegar al plató.

¿Cómo comenzó la guerra entre Antonio Canales y la propietaria de su piso?
Antonio Canales mantiene su palabra: «No le debo ni un euro a esa señora, la deuda es inexistente y en 12 años nunca me he retrasado en ningún pago mensual». Entonces, ¿qué está pasando y por qué se queja? Según él, todo comenzó cuando ella le propuso quedar a finales de agosto para que le entregara el alquiler en mano.
A partir de aquí, y siempre según la versión del coreógrafo, la propietaria habría comenzado a pedirle que le pagara mensualidades antiguas. Como él se negó -al considerar que no le debía nada-, ella habría comenzado a denunciarlo públicamente y habría tomado medidas como reducirle la luz: «Hay que tener mucho estómago para dejarnos con luz solo para una bombilla«.

«¿Qué hago yo siendo un okupa con más de 60 años? Solo espero que me deje en paz«, dijo muy emocionado mientras lloraba en directo. La mujer le ha dicho que quiere que se vaya del piso, pero él no quiere hacerlo: «Ahora no me voy«. Ella insiste en que le debe 5.000 € y que está dispuesta a llevarlo a los tribunales para cobrar ese dinero, así que habrá que ver cómo termina la cosa.
El problema es que dice que le tiene miedo a la propietaria del piso: «Tengo pánico y temo por mi vida y por mi integridad porque estoy recibiendo muchas presiones. Me está extorsionando para que me vaya y me está haciendo la vida imposible. Hoy he sentido auténtico pánico porque he visto un montón de coches tintados detrás de mí y sé que había lobos, matones y gente terrible», lamentó en su perfil de Instagram.