Letizia ha sido señalada como la mala de la Casa Real en varias ocasiones desde que ascendiera al poder. Uno de los máximos hostigadores es Juan Carlos de Borbón, su suegro, que nunca la ha podido ni ver. Siempre se ha dicho que no le hizo nada de gracia la aventura de Felipe VI y la periodista porque no tenía sangre real, estaba divorciada y era claramente republicana. El emérito habría hecho lo imposible para evitar que formalizaran su relación, pero su hijo dejó claro que sería ella o no se casaría con nadie. El padre tuvo que callar, ante esto, ya que no quería quedarse sin nieto y poner en riesgo la continuidad de la monarquía.
Pilar Eyre ha conseguido más información sobre esta mala relación entre ellos y, sobre todo, ha informado sobre en qué punto se encuentran. Lo hace en un artículo de
«Le llama

Juan Carlos de Borbón acusa a Letizia de haber impedido su reunión con el rey inglés
No contento con esto, también la culpa de hechos más recientes: «Le ha señalado injustamente a ella como la responsable que el rey Carlos de Inglaterra anulara a última hora la comida con él en Londres». ¿De verdad cree que Letizia tiene tanta influencia en la monarquía británica? Parece que así lo piensa Juan Carlos, que se habría dedicado a criticarla durante todo el viaje en Sanxenxo: «En estos seis días que ha estado en España, ella ha estado muy presente en las conversaciones de las largas horas de comidas, copas y confianza con sus amigos».

Pilar Eyre asegura que Letizia es «la bestia negra» del emérito, a quien responsabiliza de «todos los agravios» que recibe. Su relación sería cada vez peor, teniendo en cuenta que en un principio él la trataba «con indiferencia» y no «con desprecio» como ahora. Queda claro que no le cae bien la nuera, a quien estaría encantado de ver menos ahora que vive lejos.