La Policía Estatal de Maine, en los Estados Unidos, ha encontrado el cadáver de Robert R. Card, el autor del tiroteo masivo que miércoles causó 18 muertos y 13 heridos a Lewiston, en el norte de la costa este de los EE. UU.. De este modo, se acaban los dos días de tensión, con miles de ciudadanos cerrados a casa. Las autoridades han confirmado que el principal sospechoso de la matanza se ha suicidado.
El cuerpo ha sido localizado viernes por la noche en un bosque situado a unos 13 kilómetros del lugar donde tuvo lugar la masacre, cerca de un centro de reciclaje donde solía trabajar el sospechoso, que vestía la misma ropa con que fue visto miércoles. El vehículo del sospechoso, un totterreny blanco, se localizó el mismo día de la matanza muy cerca de un embarcadero.
«Soy aquí esta noche para informar que la Policía Estatal de Maine ha localizado el cuerpo de Robert Card a Lisbon. Es muerto«, ha confirmado este viernes en una rueda de prensa la gobernadora de Maine, Janet Mills, que ha dicho que ha «llamado al presidente Biden para informarlo de la noticia» y ha agradecido a las fuerzas de la orden «su valentía, determinación y fortaleza» en la investigación del sospechoso.
Mills, que ha expresado su alivio en saber que «Card ya no es una amenaza para nadie», ha asegurado que, «las fuerzas de la orden siguen investigando a fondo los hechos» para «dar el cierre» a esta «tragedia» y ofrecer una explicación a las víctimas y las familias. Entre las 18 víctimas mortales, hay varios miembros de la comunidad sordo-muda, que celebraba una reunión en uno de los locales donde el asaltante abrió fuego.
Se levanta el confinamiento de la población
El hombre, de 40 años, exmilitar que había ingresado por problemas psiquiátricos, abrió fuego en dos locales con una arma automática. Desde miércoles, que se cometió el ataque mortal, se lo buscaba intensamente y la población estaba confinada, una situación que se ha acabado este mismo viernes. Ha sido lo peor tiroteo, con más víctimas, de este año.
Con este tiroteo, ya son 565 los tiroteos perpetrados este año en los Estados Unidos, según la organización sin ánimo de lucro Gun Violence Archive, que elabora estadísticas sobre este tipo de incidentes. Esto acerca el país a cerrar el 2023 con datos récord de incidentes de este tipo, a pesar de los esfuerzos de la Administración de Joe Biden para establecer nuevos límites para acceder en las armas, especialmente las de tipo semiautomático.
