Amnistía Internacional critica la «doble moral» de la UE para acoger refugiados ucranianos, pero cerrar la puerta a quienes huyen otros países. En el informe anual, la organización apunta que la acogida a los ucranianos ha estado «generosa» y «contrasta marcadamente» con «el rechazo a menudo violento» que la UE mujer a otros migrantes y refugiados en sus fronteras exteriores. «Esta doble moral pose de manifiesto el racismo inherente en las políticas si prácticas de la UE en sus fronteras», apunta. A pesar de celebrar la protección inmediata que la UE mujer en los ucranianos, Amnistía Internacional lamenta la «discriminación» porque se excluyen de la protección ciertos grupos, como los no nacionales que viven en Ucrania con permiso de residencia temporal.

El presidente de los EE. UU., Joe Biden, con el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski | Europa Press
El presidente de los EE. UU., Joe Biden, con el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski | Europa Press

Invasión rusa

El apartado del informe sobre Europa se centra en gran parte en la invasión rusa de Ucrania y sus consecuencias. El documento señala que hay más de siete millones de personas desplazadas en Ucrania y cinco millones que han huido en países europeos, mientras casi tres millones han ido a Rusia y Bielorrusia.

Con la respuesta a la crisis migratoria por la guerra de Ucrania, Amnistía Internacional defiende que la UE ha mostrado tener «capacidad más que de sobra para acoger grandes cantidades de personas que buscan seguridad y ofrecerlas acceso en la salud, educación y alojamiento». Ahora bien, la organización lamenta que las fronteras de la UE se hayan mantenido «vetadas» a quienes huyen de los conflictos en Siria, Afganistán y Libia.

Críticos con la ONU

«La respuesta a la invasión rusa de Ucrania ha hecho patente el que se puede hacer cuando hay voluntad política: el mundo entero lo ha condenado, se han iniciado investigaciones sobre los crímenes que se estaban cometiendo y se han abierto las fronteras a las personas refugiadas», apunta la secretaria general de Amnistía Internacional, Agnès Callamard.

Además, la organización avisa que «se hubieran salvado miles de personas» si Occidente hubiera condenado con tanta fuerza los crímenes rusos en Chechenia y Siria. «Si la guerra de agresión rusa deja una cosa clara para el futuro del mundo, es la importancia de tener un orden internacional basado en unas normas que se apliquen de manera efectiva y coherente», apunta Amnistía Internacional, que apuesta para «renovar» este orden porque se «beneficien todas las personas a todas las partes del mundo».

Más allá de la UE, el informe lamenta que el Consejo de Derechos Humanos de la ONU votara parar las investigaciones y los debates sobre los posibles crímenes de China contra los uigures a Xinjiang. Además, Amnistía Internacional apunta que el 2022 ha sido «uno de los años más mortíferos» para la población palestina en Cisjordania, donde las fuerzas israelíes han asesinado al menos 151 personas, y las autoridades israelíes continúan poniendo en marcha planes para ampliar los asentamientos ilegales.

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