Júlia López será la nueva presentadora del TN fin de semana junto con Joan Raventós en esta nueva etapa de 3CatInfo que se estrena hoy mismo. Este es un reto mayúsculo para ella, tal como ha confesado en una entrevista en La tarda de Catalunya Ràdio que sirve para conocer un poco mejor esta nueva cara. Hasta ahora, solo la habíamos visto en el 324. ¿Cómo se ha preparado para el salto a TV3? Ella debutó un 1 de enero de 2022, una fecha cercana que recuerda que vivió «con mucho nerviosismo«.
En aquel momento no se imaginaba, ni de lejos, que acabaría presentando un TN: «Qué va… Yo tenía muchas ganas de vomitar de los nervios, aquel día, por culpa de los nervios. Era horroroso, no dormí y sufrí mucho con un nudo en el estómago fuerte«. «Lo pasé muy mal y llegué a pensar que no sabía si podría dedicarme a esto. Ahora he aprendido a convivir con los nervios y sé que estaré nerviosa, pero como he visto que nos hemos ido superando todos, pues creo que lo podremos hacer», añade.
Le propusieron que fuera la encargada de presentar el Telenotícies el día de la final de Liga, dice: «Había quedado con los amigos para ver al Barça y vi una llamada de mi jefe, cosa que me asustó porque eran casi las diez de la noche. Me dijo que me llamaba por si quería avisar a mi familia, que no se enteraran por la prensa porque se había filtrado que finalmente yo sería una de las nuevas caras del TN«. Le habían hecho una prueba previamente para ver si era compatible con Joan, si había feeling porque no se conocían: «Pude intuir algo, pero podía ser tanto sí como no. Yo estaba 50%-50%«.
Júlia López y Joan Raventós harán tándem en el nuevo TN fin de semana
Le fue muy fácil conectar con el antiguo corresponsal en Bruselas, por lo que dice: «Nos presentamos, empezamos a hablar y pensé que era muy agradable. Aquello de que te sientes cómodo hablando con alguien y parecía que nos conociéramos de toda la vida. Tomamos un café, fuimos directos a la prueba. Es cierto que al principio estábamos muy rígidos los dos, pero al cabo de un rato de práctica nos soltamos, fuimos a comer y nos caímos bien». Él le ha dado la razón en una intervención telefónica: «Hace muy poco que nos conocemos, pero la conexión ha estado desde el minuto 0. Ha sido muy agradable conocerla porque, aunque tengas la presión añadida de que es una persona con quien te tienes que entender, con ella ha sido muy fácil».
Júlia reconoce que ha tenido síndrome del impostor porque es consciente de que hay gente con mucho talento en la casa: «Al principio, me preguntaba qué habían visto en mí… y la verdad es que me ha costado mucho creérmelo. Soy bastante natural, me llevo muy bien con la gente de la casa, no he intentado pisar a nadie ni me he postulado con la ambición de querer llegar lejos y creo que eso me ha abierto puertas. Soy una persona como cualquier otra, pero les he caído bien y mi espontaneidad quizá les habrá gustado».
No se imaginaba llegar hasta aquí, ya que lo veía «demasiado lejos«. Le gustaba hacer su trabajo de hormiguita y reportera, saliendo a la calle: «Era muy feliz haciendo eso y creía que ese sería mi futuro, no me imaginaba en absoluto que llegaría a donde he llegado. Estoy un poco descolocada y aún no me lo acabo de creer«. ¿Lo que más le asusta? Que la gente los compare con la pareja icónica que estaba al frente del TN fin de semana hasta ahora como son el Ramon Pellicer y Cristina Riba: «Sé que es inevitable, pero espero que no lo hagan«.
De su vida privada, dicen los compañeros que es «fan de Bad Bunny«, «el alma de la fiesta» y que «habla por los codos«. Una periodista que ha ido escalando y que se quedará sin las casas rurales que hacía los fines de semana.
