No se puede decir que haya sido una semana fácil para los protagonistas de Com si fos ahir. El accidente del Toni pequeño (Oriol Cervera) sigue muy presente, después de que un chico se pelease con Karim (Moha Amazian) y buscara venganza contra ellos. Su vida sigue en peligro y los médicos están alerta porque la primera operación, aunque exitosa, ha derivado en una nueva infección. Los seguidores de la serie diaria de TV3 tendrán que seguir las pistas de esta trama. Para intentar recuperar el espíritu divertido de la ficción catalana tras unos días muy tensos, los guionistas girarán las historias hacia una amistad muy peculiar.
La travesura de la prima más tramposa
La nueva alianza entre Agustí (Marc Rodríguez) y Lídia (Míriam Alamany) huele a chamusquina. La prima de Gina (Meritxell Huertas) es una de las incorporaciones de esta octava temporada y los guionistas siguen aprovechando su talento para meterse en todo tipo de líos. Al menos, y haciendo memoria, solo hay que recordar su estrategia para conseguir la herencia de la tía Matilde (Mercè Comes) y la historia con el estafador del amor. Cuando los fieles espectadores pensaban que estaría tranquila una temporada, ha encontrado una nueva víctima para sus engaños. Agustí es un hombre bastante ingenuo, vulnerable y a menudo tonto. Lídia ha encontrado la grieta perfecta para aprovecharse de los buenos precios que hace el fontanero y que trabaje para ella. ¿Y cómo lo ha hecho? Rascando en sus recuerdos y aprovechando que Agustí ve en ella la figura de su esposa Maria Pilar, que murió hace quince años.
En últimos episodios, Gina ha comenzado a sospechar de las acciones de su prima y, preocupada por Agustí, le ha alertado de sus intenciones. Tras el desmayo que sufrió el pobre hombre, Gina quedó con él para saber qué estaba pasando entre ambos. La conversación terminó con una revelación importante: Lídia se está aprovechando de su vulnerabilidad y ahora es el momento de devolverle la pelota. En este episodio del miércoles 21 de mayo, Agustí queda con su nueva amiga para hablar de negocios. Haciendo su mejor papel, le ofrece un presupuesto con un precio bajísimo, casi gratis, y ella, siendo consciente de que se estaba aprovechando, no ha intentado detenerlo, pensando solo en su beneficio personal.
El castigo para este personaje tan descarado
¿Pero cómo ha cambiado de parecer Agustí? Gina ha sido más lista y entre ambos han pensado la estrategia para ver hasta qué extremo es capaz de manipularlo. El resultado ha sido claro: hará lo que haga falta para salir ganando. Agustí por fin ha abierto los ojos y animado por la prima, organizan una pequeña venganza por todo lo que ha hecho.
Lídia le pide a Gina si puede quedarse en el piso a dormir. A medianoche, empieza a sonar el bolero que bailaron Agustí y su esposa el día de la boda, haciendo que se despierte y se asuste porque en teoría está sola en casa. De repente, y con el piso a oscuras, se encuentra con unas gafas que no son suyas y sale corriendo a la habitación de Gina para esconderse. Cuando por fin ha conseguido dormirse, empieza a escuchar unas voces fantasmagóricas que la llaman sin parar.
¿Quién está detrás de esta broma? Todo forma parte de la broma de su prima y Agustí, que al día siguiente la reprenden por lo que ha hecho. Ella termina disculpándose, pero incluso en medio de un mea culpa, intenta colarle al pobre hombre que si quiere puede seguir trabajando para ella. ¿Cuál será la próxima aventura de este personaje?
El seductor provoca grietas entre las trabajadoras de la Barnateca
Las últimas semanas, el nuevo seductor se ha encargado de jugar a diestra y siniestra con las mujeres de Com si fos ahir. Eugeni (Oriol Vila) ha jugado con sus encantos para intentar que las trabajadoras de la Barnateca quieran estar con él. Aunque Cristina (Carlota Olcina) está bien colgada, Gemma (Àurea Márquez) se ha dado cuenta de que no puede confiarse. Ante la primera negativa, intentó buscar las cosquillas de Itzíar (Mar Ulldemolins) sin éxito. Con quien sí triunfó fue con Cèlia (Sara Espígul), una trama aún muy presente que promete emociones fuertes cuando Quique (Bien Duran) descubra la infidelidad de su novia.
Aun así, sí logró que la chef del negocio de catering comenzara a trabajar para él, y esta decisión ha provocado una pequeña grieta entre las trabajadoras. Gemma no lo termina de ver claro y Cristina, obsesionada por los elogios de este personaje, es capaz de permitirlo todo. Itzíar ha llegado tarde al trabajo y sus jefas responsabilizan a la alianza con Eugeni de este descuido.
Lo que no saben, sin embargo, es que está así por su nueva compañera de trabajo. Aunque el seductor no logró liarse con él, la chef ha encontrado en la cocinera del hotel una amistad que podría avanzar mucho más. Ahora bien, la cuestión será ver si puede mantener ambos trabajos con la misma intensidad. El final de la semana se acerca en Comsi y aún quedan muchas preguntas sin respuesta.
