El caso del crimen de Helena Jubany en el año 2001 es uno de los sucesos más mediáticos de la historia reciente de la crónica negra de Cataluña y ahora hay un giro de guion que puede ser determinante. La Fiscalía ha solicitado que se vuelva a citar a declarar a Santi Laiglesia, investigado en el caso, y que se reabra el procedimiento -que estaba archivado- respecto a Ana Echaguibel. La petición de la Fiscalía llega después de que se hayan ampliado los informes biológicos de ADN que solicitó a la policía científica y que han dado «resultados genéticos positivos»: se ha encontrado ADN de Laiglesia –principal sospechoso– en el jersey de la víctima.

En el caso de Echaguibel, la jueza de Sabadell había denegado la extracción de ADN, mientras que sí la había autorizado en el caso de Laiglesia y Xavi Jiménez, otro de los cuatro investigados en la causa. Desde noviembre de 2024, la policía científica apuntaba que había una alta probabilidad de que el ADN de Laiglesia estuviera presente en el jersey, mientras que de Jiménez no se encontró ADN compatible.

Helena Jubany
Helena Jubany

En cuanto a la reapertura del procedimiento a Ana Echaguibel, cabe destacar que la acusación particular del caso ya había solicitado que se le reabriera la causa también a ella y que se volviera a investigar su implicación en el caso. La ampliación del informe de la policía científica sobre las muestras de ADN ha acabado haciendo que la Fiscalía se sume a la petición. Ahora, si la jueza accede a lo que solicitan tanto la acusación particular como la Fiscalía, se le podrán extraer muestras para comprobar si algunas de las huellas de ADN femenino que se han encontrado en el jersey de la víctima coinciden con el perfil genético de Echaguibel, ya que no pertenecen a Montserrat Careta, la otra mujer que había sido imputada en el caso.

Careta se suicidó en la prisión de Wad-Ras en 2002, cuando estaba recluida provisionalmente precisamente con Echaguibel, quien después fue exculpada por falta de pruebas en una investigación especialmente fallida. En ese momento se acabó archivando el caso y no se reabrió hasta 2020 a petición de la familia Jubany, después de que dos episodios de Crims que sacudieron Cataluña en plena pandemia de Covid pusieran en evidencia el fiasco judicial del caso.

La búsqueda de ADN ha sido uno de los pilares de la nueva fase de la investigación, ya que a finales de junio la jueza de Sabadell que instruye el caso pidió a la Policía Judicial que se buscaran muestras de ADN de Montserrat Careta, una de las cuatro investigadas en la causa, y poder determinar si el rastro genético coincidía con el encontrado en el jersey de la víctima.

El abogado de la familia vaticina que finalmente habrá juicio

En un post a través de las redes sociales, el abogado Benet Salellas, quien defiende los intereses de la familia Jubany, ha publicado una parte del informe donde se muestra que se ha confirmado la presencia de ADN de Santi Laiglesia –aunque en el tuit ha tachado el nombre y solo se ve la inicial S– en el jersey de Helena Jubany y ha destacado: «Después de la persistencia infatigable de más de 20 años de la familia de Helena Jubany hemos sabido de quién era el ADN masculino de su jersey. Ahora podemos garantizar, finalmente, que tendremos juicio…»

Un largo viacrucis judicial y policial

Desde el año 2001, cuando se cometió el crimen, la familia de la víctima ha pasado por un largo viacrucis judicial rodeado, además, de una gran expectación mediática -especialmente motivada por la aparición del caso en el programa televisivo ‘Crims’-. Desde 2001 se han investigado cuatro personas: Montserrat Careta (muerta en el año 2002), Santi Laiglesia, Xavi Jiménez y Ana Echaguibel. Y, después de más de 20 años, concretamente en el año 2022, la policía científica pudo identificar muestras de ADN de, al menos, dos personas en el jersey que Helena Jubany llevaba el día que fue asesinada, motivo por el cual la policía solicitó el perfil genético de las cuatro personas investigadas.

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