Los sindicatos de docentes la Intersindical y CGT denuncian que el Departamento de Educación, en manos de la consejera Esther Niubó, quiere suprimir una línea de infantil 3 para el próximo curso en las escuelas Alba y Espiga de Lleida. Las dos organizaciones sindicales, a través de sus respectivos comunicados, consideran que la decisión -que denuncian- de la consejería «favorece de manera indirecta el crecimiento de la escuela concertada en detrimento de la enseñanza pública»: «El cierre de una línea en cualquier escuela pública representa un ataque directo contra la igualdad de oportunidades y los derechos de las familias que apuestan por una educación de calidad, accesible y gestionada íntegramente desde el ámbito público», exclama la Intersindical.
Los sindicatos de docentes denuncian que este movimiento, además de ir en contra del objetivo de reducir las ratios -una de las claves para mejorar los malos resultados de las pruebas PISA, según la comunidad educativa-, «también reduce los recursos y oportunidades del sistema educativo público en conjunto, y genera un efecto dominó que pone en riesgo la continuidad de centros educativos públicos en el futuro». Es por este motivo, entonces, que las dos organizaciones exigen a la consejería dar marcha atrás en la medida que afectará a estos dos centros educativos de l’Horta de Lleida (Segrià) y, al mismo tiempo, hacen un llamado a la comunidad educativa, familias y ciudadanía a movilizarse «en defensa de la educación pública».

Excusarse en la «baja natalidad»
Las dos organizaciones sindicales de la comunidad educativa denuncian que la consejería plantea suprimir las líneas de infantil 3 en estos dos centros «excusándose en la baja natalidad»: «Es inadmisible que, bajo el pretexto de la evolución demográfica o de criterios económicos, se prioricen políticas que debilitan la escuela pública», denuncian. Si bien es cierta la tendencia a la baja de la natalidad, desde la Intersindical remarcan la importancia de continuar apostando por la escuela pública. «Apostar por la escuela pública no es solo una cuestión de principios, sino una necesidad para garantizar una sociedad cohesionada, equitativa y con igualdad de derechos para todos», concluyen.