El Gobierno de Salvador Illa ha anunciado este lunes, coincidiendo con el inicio del nuevo curso escolar, que propondrá un acuerdo de colaboración con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), la entidad que se encarga de elaborar las pruebas PISA (Programme for International Student). Así lo ha hecho saber el jefe del ejecutivo catalán durante la visita en la escuela Salvador Dalí de Figueres, acompañado de la nueva responsable de la cartera de Educación y Formación Profesional, Esther Niubó, donde ha asegurado que el objetivo de este nuevo acuerdo es «contar con los mejores expertos» y revertir los males resultados que obtuvo Cataluña en las últimas pruebas: «Será un acuerdo para contar con los mejores expertos y las mejores prácticas en materia educativa», ha apuntado Illa.
Este acuerdo, pero, todavía no es oficial. De hecho, la consejera de Educación propondrá al resto del equipo de Gobierno este pacto de cooperación durante la reunión del Consejo Ejecutivo de este martes. El presidente de la Generalitat ha admitido que no será un proceso «inmediato» y que no se podrá hacer ni «en un mes o un año», pero sí que considera que «contando» con el apoyo de toda la comunidad educativa se podrá conseguir «en un futuro próximo»: «La excelencia en la educación en Cataluña es nuestro objetivo. Una educación de calidad y educativa, que ofrezca a todos los chicos y chicas las mejores oportunidades para aprender». En este sentido, Isla ha destacado como grandes novedades del curso la prohibición de usar los dispositivos móviles y los programas específicos de matemáticas -el cual no ha conseguido llenar todas las plazas ofertadas en la primera convocatoria-, comprensión lectora e inglés. Medidas, tal como ha recalcado, «preparadas» por la anterior consejería y que el actual se ha hecho suyas.

Rechazo sindical en el acuerdo con la OCDE
Ante este anuncio que ha hecho el nuevo jefe del ejecutivo catalán, el sindicato mayoritario del sector educativo, USTEC, se ha mostrado contrario a unir fuerzas con esta organización: «No consideramos que tenga que ser el mundo empresarial quien dictamine qué tienen que ser los objetivos de la educación», ha aseverado la portavoz nacional de la organización sindical, Iolanda Segura, que considera que la OCDE se rige por criterios «empresariales» y no pedagógicos. Es decir, en otras palabras, la sindicalista considera que no es la mejor manera de hacer frente a los últimos resultados de las pruebas PISA, los cuales demuestran una bajada significativa del nivel del alumnado catalán, especialmente en el ámbito de la lectura.