Chenoa ha acudido al plató de El Hormiguero y ha soltado un montón de titulares inesperados. Entre ellos, ha confesado que ha dejado de vivir en Madrid porque necesitaba un cambio vital que ha implicado un traslado al campo. Ahora mismo, es propietaria de una casa de pueblo en un municipio cercano a Segovia. Aquí, cuenta con un terreno de 100 metros cuadrados y es muy feliz: «Vivo en una casa que antes era un gallinero, tengo liebres y un huerto, lo que me hace ilusión. Mi idea era que no se supiera, pero ahora ya está… Lo que hago es organizarme y tomármelo todo con mucha más calma».
La idea de esta entrevista era presentar su nuevo single, pero poco han hablado de eso. En cambio, la charla ha servido para conocer detalles de su vida como que tiene muchísima flexibilidad, que cree en la numerología y también en los fantasmas. Pocos lo sabían, pero el primer trabajo de la cantante fue como secretaria de un parapsicólogo: «En aquella época, presencié fenómenos paranormales. Si una ventana se cierra de golpe, le pediré a la presencia que lo ha provocado que no se me aparezca porque no estoy preparada«.
Pablo Motos se lo ha tomado a broma, pero ella lo decía en serio: «A mí no se me ha aparecido nunca ningún fantasma porque no estoy preparada y lo digo en voz alta mientras ando por casa. Ellos respetan mucho estas cosas». Chenoa asegura que nunca ha usado magia negra, pero sí que ha congelado a alguien para que la dejaran en paz: «La energía y los pensamientos existen».
Chenoa muestra cuál es su truco para pasar desapercibida
Chenoa ha revelado, en otro momento de la entrevista, que tiene un truco para intentar pasar desapercibida. Después de tantos años en primera línea, muchísima gente la conoce y eso le dificulta poder ir a comprar sin que la gente la detenga. ¿Qué hace? Se ha comprado una gorra negra que viene con una peluca rubia incorporada. ¿El problema? Que, realmente, todavía parece bastante ella.
Un año después de su divorcio, la artista habla del desamor en su última canción. ¿Qué ha dicho sobre esta situación? Básicamente, que ha llegado a sentirse «perdida«: «Yo me involucro mucho y he tenido que bailar de rabia para sacar todo lo que tenía dentro y no sabía cómo gestionar».
