Ana Obregón lo ha hecho. En una entrevista millonaria y muy sorprendente, ha dejado a todo el mundo boquiabierto al reconocer que la niña, en realidad, es hija de Álex Lequio. Un concepto de hija-nieta que ha explotado la cabeza de muchos, que todavía no se creen que haya sido capaz de encargar una gestación subrogada con el ADN del hijo muerto. Esta locura futurista y extraña la tenía que explicar bien y lo ha intentado hacer, insistiendo en el hecho que este había sido el último deseo de su hijo y que no podía negárselo.
La entrevista en la revista
Un deseo bastante estrambótico con el que su madre se obsesionó en cumplir. Ana Obregón es consciente que el tema ha generado mucho debate -incluso antes de saberse quién era el padre de la criatura- y se muestra indignada: «Este debate es absurdo porque esta técnica de reproducción asistida se hace desde hace muchísimos años y es legal en muchos países del mundo. Muchas parejas que no pueden tener hijos o parejas homosexuales utilizan esta técnica. Pero ¿qué es este escándalo ahora? Aquí en Estados Unidos la gente está abierta, pero en España estamos en el siglo pasado». Dice que ya tiene todos los papeles en regla y que la niña figura como si fuera hija suya: «Legalmente, es mi hija y así aparece en su pasaporte. La registraré en el consulado y la podré llevar a casa de aquí en un mes aproximadamente».

Ana Obregón asegura que cumplir el último deseo del hijo es lo único que lo ha mantenido con vida
Ana Obregón asegura que no ha sido fácil el proceso y que esta batalla es la que lo ha mantenido con vida: «Si no fuera por eso, yo ya no estaría aquí», llega a decir. Dice que en ningún momento se planteó no iniciar este procedimiento: «Si el testamento y la última voluntad de mi hijo era esta, ¿cómo no lo iba a hacer? Nadie en todo el mundo puede poner en entredicho que cuando una madre entierra el hijo tiene que cumplir su última voluntad. Si hay opiniones en contra, no admitiré ninguna. Solo la de un padre o una madre que haya enterrado un hijo porque son los únicos que pueden opinar y entenderme».
La actriz considera que esta niña es «un milagro» que le ha permitido tener aquí un poco de su hijo muerto: «He luchado a través de un océano para poder decirle algún día a mi niña que es la hija de un héroe y que es la niña más deseada del mundo porque le han deseado desde la tierra y desde el cielo». Muchos han criticado que la haya tenido cuando ella ya tiene 68 años, pero dice que esto no le preocupa porque sabe que le podrá dejar en «una muy buena situación» cuando ella ya no esté: «Yo he vuelto a vivir y ahora tengo una razón para hacerlo».
En este texto demoledor, Ana Obregón deja claro que incluso ha llamado a la niña como quería su hijo: «Él siempre decía que llamaría Ana a su primera hija». Y aquí ha soltado otro titular escandaloso que muchos han destacado, cuando ha dejado caer que podría volver a iniciar el procedimiento: «Me habría gustado también que fuera niño, pero ¿quién sabe? Mi hijo quería tener cinco hijos, así que quizás el niño llega también algún día. Podría ser que lo volviera a hacer, podría ser. Fallé a mi hijo porque no lo pude salvar, pero le juré con mi vida que le daría una hija y lo he hecho».

Además, ha continuado con la historia macabra y ha asegurado que la niña dormirá en la habitación de su hijo porque quiere que el ángel la cuide por las noches. Dice que no le ocultará que ella es su abuela: «Le diré con naturalidad que su padre está en el cielo y que la suya es una madre donante. ¿Cuál es el problema?». Lo que queda claro es que ella vuelve a ser feliz porque tiene un trozo de su hijo con ella: «Cuando la abrazo siento que lo estoy abrazando a él, es lo único que me queda vivo de él. Ahora dejaré el luto porque me merezco ser feliz».