El ejército de Israel ha bombardeado con dureza diversas veces el principal hospital de Gaza, el complejo Al-Shifa, durante las últimas 24 horas, dejándolo sin electricidad, agua, combustible, alimentos ni manera de comunicarse con el exterior, es decir, lo ha dejado prácticamente incomunicado, según ha informado este sábado el Ministerio de Salud palestino. En este sentido, la organización internacional Médicos Sin Fronteras (MSF) denuncia que, a raíz de los fuertes bombardeos contra la población civil y el centro sanitario, todo el personal médico y centenares de pacientes han quedado atrapados entre los escombros del hospital. «La situación es catastrófica. Reclamamos que se paren los ataques en los hospitales de Gaza y haya un alto el fuego inmediato», exigen desde MSF.
El director del hospital bombardeado denuncia que al exterior de Al-Shifa hay francotiradores que disparan contra cualquier persona que intente salir del recinto. Desde la organización internacional, de la cual algunos miembros han quedado atrapados en el interior del edificio, denuncian que el ejército israelí ha lanzado misiles contra el ala de maternidad y el ala de consultas externas, pero que también han afectado en la UCI infantil. Un cirujano de MSF, Mohamed Obeid, ha advertido que «hay muchos pacientes ya operados y no pueden andar», mientras que el personal sanitario no puede irse. «Quién se ocupará de los pacientes», se pregunta. «El hospital se ha quedado sin electricidad. Las ambulancias ya no pueden desplazarse para recoger los heridos, y los bombardeos incesantes impiden evacuar los pacientes y el personal», aseveran desde MSF en un grito de ayuda en la comunidad internacional: «Nos están matando aquí, por favor feudo algo», claman.
Alto el fuego
Diversas organizaciones internacionales, incluyendo las Naciones Unidas, han pedido un alto el fuego urgente para frenar la escala de violencia entre Israel y Hamás que ya hace más de un mes que afecta la población civil. También exigen que se ponga punto final a los ataques en el hospital de Gaza, puesto que consideran que no es un objetivo militar justificado, a pesar de que, por su parte, Israel argumenta que bombardear el centro sanitario está «más que justificado» porque cree que Hamás tiene un centro de mando al sótano.
