Santiago Abascal, líder del partido español de extrema derecha, Vox se ha reunido a Israel con Benjamin Netanyahu y se ha comprometido con el jefe del gobierno israelí a revocar el reconocimiento del Estado palestino que hoy mismo ha hecho el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, si llega al poder a la Moncloa. Después de que el país vuelva a atacar los palestinos y continúe la masacre, este golpe a Rafah, Abascal ha asegurado su máximo apoyo «al pueblo de Israel» al cual reconoce «el derecho a defenderse». También le ha trasladado que «Pedro Sánchez no es España», y ha afirmado que el presidente español está «tapando sus casos de corrupción política y económica con el reconocimiento del estado palestino».
El encuentro entre el líder del gobierno de extrema derecha de Israel y el presidente de Vox ha tenido lugar a la Oficina del primer ministro, en Jerusalén, y ha durado más de una hora, según informa Vox. Netanyahu ha garantizado a su vez el apoyo de su ejecutivo a la soberanía de la nación española. A la vez ha afirmado que mantendrá la ayuda y el compromiso en la lucha antiterrorista con España «a pesar de la política hostil» del gobierno de Pedro Sánchez. De hecho, Abascal ha coincidido con Netanyahu y ha asegurado que Sánchez intenta tapar agujeros con sus declaraciones a favor del estado palestino, tal como también lo hace, ha añadido, con los «ataques» en el jefe de estado de Argentina, Javier Milei. También ha dejado claro que «mientras quede un solo rehén en manos de Hamás» y «hasta que no desaparezca la organización terrorista» nadie tiene derecho a pedir a Israel que renuncie a las operaciones de autodefensa.
Una alianza de extrema derecha
Netanyahu, el partido del cual, el Likud, es aliado de Vox al ECR Party, ha mostrado la confianza, reafirmada por Abascal, que si llega a presidente del gobierno español el líder de la formación española ultraderechista «revertirá las medidas hostiles del gobierno de Sánchez y de la creación del estado de Palestina». También ha reiterado el apoyo a la «soberanía de la nación española» y ha sacado importancia, según Vox, a «alguna voz aislada a la oposición que pedía apoyo a separatistas en España como represalia por las agresiones de Sánchez».
