Hace más de 30 años que Samantha Fox, uno de los mitos eróticos de los años 80, visitó TV3 de la mano del Màgic Andreu al programa
Ahora bien, el detalle más impactante es que la actriz aterrizó en Barcelona con un novio que nadie sabe quién era, puesto que Màgic Andreu no lo llegó a conocer porque desapareció luego que pisó la capital catalana. En este sentido, el mago recuerda que el chico en cuestión “se ve que bebía mucho” y que, simplemente, no apareció durante aquellos tres días. Continuando con la vida privada de aquellos días, Andreu también comenta que visitaron dos veces el mismo restaurante, la Cúpula del Garraf, en Sitges. Dos veces en solo tres días, le debía de gustar mucho a Fox. En estos ratos de distensión, comenta Andreu, Fox “no se cortó” en absoluto, asegurando que el personaje —el mito erótico— se había comido a la persona.
De esta misma manera transcurrió la entrevista que le hizo Andreu en TV3. De hecho, el mismo mago asegura que durante la conversación se dijeron, y hacer, cosas que hoy en día serían del todo censurables, como por ejemplo que Fox le dijera que le quería hacer el amor o que el mago hiciera un juego de manos donde un pañuelo simulaba una erección. Dos tramos por los cuales hoy clamaríamos al cielo. Aun así, el mismo mago asegura que en aquella época él ya censuraba segundos qué comentarios, apuntando que en la televisión pública española se habían dicho de mucho más gordas aquellos años.