«Somos un partido de kilómetro cero». Así define ERC uno de los regidores con más años de servicio en un ayuntamiento. Precisamente, varios alcaldes y cuadros territoriales quieren aprovechar la renovación de la formación, arranque con el anuncio del congreso del partido para el 30 de noviembre, para hacer sentir su voz de manera más contundente y más estable que hasta ahora. «Tenemos la sensación que el partido no nos ha escuchado y, en cambio, el Gobierno lo teníamos a la otra banda del teléfono», coinciden dos voces que ven una nueva oportunidad para recuperar influencia dentro de la estructura y la dirección de la formación.
De hecho, ERC, todo y el batacazo electoral en las pasadas elecciones municipales del 25 de mayo, tiene 329 alcaldes y 2.898 regidores. Y un dato clave, 250 municipios son en manos de los republicanos por mayoría absoluta. Un verdadero plantel de futuros liderazgos. En este sentido, miembros del Consejo Nacional de los republicanos apuntan la opción de buscar los futuros liderazgos en el vivero de alcaldes. Al final, Oriol Junqueras, a pesar de haber estado eurodiputado, fue catapultado a la presidencia del partido cuando, como independiente, logró la alcaldía de Sant Vicenç dels Horts, en el Baix Llobregat, justo cuando ERC sufrió una bajada electoral a las elecciones municipales de 2011.

Solo un alcalde en la ejecutiva
«No puede ser que el único alcalde de la ejecutiva, sin estar representado por su cargo institucional, sea l‘Eloi Hernàndez«, indican fuentes de la formación, en referencia al alcalde de Fonollosa, un pequeño municipio del Bages, que ostenta la vicesecretaria general de Coordinación Institucional. «Habría de haber más alcaldes y marcar más la agenda política del partido», añaden. «Está todo inventado, el PSC aplica esta fórmula y le ha funcionado para superar crisis, obtener cuotas de gestión de poder y retener las grandes ciudades y municipios», arguyen.
Hernàndez es el único que hay a la «permanente» -el núcleo duro- como alcalde en ejercicio. El otro miembro con cierta experiencia de alcalde es Juli Fernàndez, que encabezó el Ayuntamiento de Sabadell del 2017 al 2019, una silla que después perdió ante Marta Farrés, una de las damas de hierro del PSC. A la ejecutiva nacional, se añade Joan Talarn, presidente de la Diputación de Lleida y exalcalde de Bellvís y Noemí Llauradó, primera teniente de alcalde de Reus y presidenta de la Diputación de Tarragona.

Tres órganos para compensar
Para compensar este poco peso del poder local, la dirección creó tres órganos consultivos municipalistas. El primero es la Mesa Institucional Municipal. Se define como el órgano de coordinación de la representación de Esquerra Republicana a las instituciones locales, que teóricamente sirve para «la participación, el asesoramiento, el debate y el impulso de las propuestas en los ámbitos que tengan incidencia en el mundo local». «Solo se ha reunido una vez», lamenta un alcalde que forma parte y que cree que no ha estado ni eficaz ni útil.
En el paquete se añade el Consejo Metropolitano, un órgano consultivo que tiene, entre otras funciones, el asesoramiento, el debate y el trabajo de un relato metropolitano. Pero las elecciones del pasado 25 de mayo han hecho perder fuelle a los regidores republicanos de estos municipios, dominados por el PSC, Comunes o PP. El tercer órgano es la Tabla de Ruralidades, que constituye «un órgano consultivo, integrado por personas afiliadas de todos los territorios del ámbito rural, que tiene como finalidad, entre otras funciones, el asesoramiento, el debate y el trabajo de un relato rural».

«Ahora toca hacernos sentir»: la voz de Marc Aloy
La ciudad más grande donde tiene una alcaldía ERC es Manresa, la capital del Bages, con una joven promesa de la formación como Marc Aloy. Un nombre de los que ha sonado por un posible liderazgo del partido en un futuro, a pesar de que la regional de la Cataluña Central insiste que todavía es pronto y que hay que consolidar la alcaldía. Aloy gobernó el pasado mandante con Juntos por Cataluña y actualmente, con el PSC. «Tiene suficiente experiencia sobre que es gobernar con unos y los otros», comenta a El Món un camisa vieja de la formación republicana. Aloy, que es uno de los firmantes y de los portavoces mediáticos del famoso
«Los alcaldes tenemos que tener más influencia en el partido, en su estrategia», apunta Aloy en conversación con El Món. En este sentido, confirma la tesis que a menudo han tenido una respuesta más directa de los consejeros del Gobierno que no de la dirección de la formación. Aloy recuerda la cantidad de alcaldes que son una verdadera despensa de la formación para encarar un nuevo ciclo político. «Nos tenemos que hacer sentir y nos tienen que hacer más caso», insiste. En cambio, otros miembros de la formación enfrían esta estrategia por no convertir el partido en «riendas de taifas» y que hagan «demasiado localismo» a escala de la política nacional.

Un verdadero vivero, Jordi Fàbrega como nombre destacado
Otro de los nombres que han tenido voladizo en los últimos años ha estado Dionisio Guiteras, vicepresidente de la Diputación de Barcelona y alcalde de Moià, capital del Moianès, un hombre de Joan Puigcercós. De hecho, ERC, con el ahora regidor y exalcalde de l’Ametlla de Mar Jordi Gaseni, preside una de las tres entidades independentistas que junto con la ANC y Òmnium marcaban la supuesta agenda civil del Proceso, como la Asociación de Municipios por la Independencia (AMI), que ahora mantiene un perfil bajo a raíz de la acción judicial del Estado.
Y uno de los nombres que suena con más bastante es el alcalde de san Pedro de Torelló, Jordi Fàbrega. Un alcalde histórico que viene del Entendimiento del Progreso Municipal, es decir, de la órbita de Iniciativa, Y que entró a militar a ERC en el mismo momento que Oriol Junqueras. Fàbrega empezó a hacer las primeras maniobras para acceder en una futura ejecutiva del partido justo desprendido de la dimisión de Junqueras. De hecho, en la última conferencia nacional defendió una enmienda por la aplicación del mandato del de octubre que firmaban otro histórico de ERC como es Joan Puig, ahora secretario nacional del ANC.
Uno de los otros nombres es el d‘Adam Tomàs, alcalde de Amposta. Oriol Lozano, de Palau-solità i Plegamans; Ferran Estruch, de Cardona; Sílvia Fernàndez, de Agramunt; Nil Papiol, de Hostalric; Jcebada Viñas, de Salt; Judit Gisbert, de Solsona; Elisabet Oliveras, de Sant Quirze del Vallès; Pere Vernet, de Santo Sadurní; Elisabet Lizaso, de Camarassa; Alba Pijuan, de Tàrrega; Baldo Farré, de Sort, y Carlos Brull, de Falset, son algunos nombres de la primera división de los alcaldes. Una auténtica capilaridad que territorial que no quieren perder y quieren aprovechar. De hecho, buena parte de las viejas estructuras territoriales y locales, así como de la