La portavoz del PSC-Unidos en el Parlamento, Alícia Romero, ha asegurado este martes que están dispuestos a negociar y hablar sobre la presidencia del Parlamento, cargo para el cual han presentado a la vicepresidenta segunda de la Cámara, Assumpta Escarp, pero ha admitido que nadie ha contactado con ellos para abordarlo.
Van «tarde»
«No nos cerramos a acuerdos y a poder dialogar. Hemos hecho una propuesta, pero nadie se ha dirigido a nosotros ni para pedirnos el apoyo a sus candidatos o para plantearnos posibilidades diversas con relación a esta presidencia», ha explicado en rueda de prensa en la Cámara a la espera del pleno del viernes, en el cual se elegirá al relevo de Laura Borràs como presidenta del Parlamento. Después de reivindicar la experiencia y el perfil institucional de Escarp, ha defendido que la responsabilidad de su grupo implicaba presentar una candidatura de una persona que puede «ordenar y prestigiar» la institución. «Vamos tarde. Podríamos haber resuelto la presidencia del Parlamento mucho antes», ha subrayado Romero, que cree que también lo habría podido hacer la misma Borràs. Así, ha lamentado que hayan tenido que esperar «para resolver esta situación irregular y para poder incorporar a un presidente o presidenta en plenas funciones».

Los comunes culpan el independentismo
Por su parte, los comunes han culpado, nuevamente, Juntos, ERC y la CUP de la situación de interinato de la presidencia del Parlamento de Cataluña y ha lamentado que Juntos decida «de forma unilateral» el liderazgo de la cámara en una ejecutiva del partido este martes por la tarde. «Consideramos que la presidencia del Parlamento no es propiedad de Juntos por Cataluña. No renunciamos a una candidatura progresista y al nombre de Joan Carles Gallego», ha dicho Cid. Así mismo, la semana que viene también se votan las propuestas de reforma de las leyes sobre las pensiones a expresidentes y los comunes piden que un expresidente del Parlamento condenado por corrupción no cobre la pensión.