Los organizadores de la fiesta de la quema de los Judas del pueblo de Alfaro, en La Rioja, dicen que se sienten incomprendidos. Lamentan que no se haya entendido lo que consideran «el contexto» de la tradición. Unos de los protagonistas de la cita de este año han sido tres muñecos del presidente de la Generalitat en el exilio, Carles Puigdemont, y los ex consejeros Clara Ponsatí y Toni Comín. En declaraciones al diario La Rioja 25, los voluntarios de la calle Tudela que colaboran en la preparación de la fiesta se han quejado de la polémica que ha generado la aparición de los tres políticos catalanes representados en unas figuras que primero se exhiben colgadas y, después, se queman. “No se han molestado en entender los ingredientes y el porqué de la tradición”, alegan. Y añaden que el independentismo lo que quiere es “llamar la atención”. La quema de Judas tiene lugar el Domingo de Resurrección y el objetivo de esta celebración es acabar con los traidores y empezar una nueva etapa. Los voluntarios han criticado que se “desenfoque el tema de la fiesta para enfocarlo en el interés independentista”.
Alegan que el tema era la literatura universal
La tradición marca que varias calles de este pueblo de La Rioja eligen personajes que, durante el año, hayan tenido lo que ellos consideran un mal comportamientoy, en una escena creada por los voluntarios, se los expone. En la calle Tudela, el hilo conductor este año, dicen, era la literatura universal, y afirman que los muñecos de Puigdemont, Comín y Ponsatí representaban Los Tres Mosqueteros, los cuales eran perseguidos, martillo en mano, por el magistrado del Tribunal Supremo Pablo Llarena.
La eurodiputada de Juntos Clara Ponsatí asiste al pleno del Parlamento Europeo acompañada de Carles Puigdemont i Toni Comín después de la detención y posterior puesta en libertad en el retorno en Cataluña | ACN
En la escena se mezclaban otros elementos y también se hacía referencia a La Odisea y aparecía el presidente español, Pedro Sánchez, atado a un palo mientras las sirenas de Yolanda Díez y Ione Belarra intentaban encantarlo con sus cantos. Los mismos organizadores se defienden diciendo que los nuevos reyes de Inglaterra, Carlos III y Camila, estaban representantes recreando una escena del Kamasutra, mientras que el año pasado representaron el Juan Carlos I y Corina.
Para presentarlo todo ello como una cuestión de libertad de expresión, los voluntarios detallan que antes de la democracia solo se podía representar como judas a “personajes de películas o genéricos”, pero aseguran que, ahora que se pueden permitir «hacer una crítica», incluyen en el abanico de nombres posibles los de los políticos. “Pero siempre hay alguien que te pone alguna pega”, añaden en referencia a los catalanes que no han visto ninguna gracia a los muñecos.
El rotativo asegura que los catalanes son de los pocos que se han ofendido, y contraponen los exiliados por haber hecho un referéndum con la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. La del PP sería el buen ejemplo, para ellos, que la alaban y afirman que el año pasado retuiteó la fotografía en que aparecía su muñeco y felicitaba a los voluntarios que lo habían montado. También hablan de Risto Mejide y el periodista Eduardo Inda, de OK Diario, que según aseguran se mostraron “encantados”, a pesar de que se los representó en la película Instonto básicoo.
