Dos escándalos de compra de votos han sacudido la campaña electoral española. La Policía Nacional ha detenido una decena de personas en Melilla y la Guardia Civil ha detenido al menos a siete más en Mojácar (Almería) en dos tramas corruptas que el Ministerio del Interior investiga como casos separados. Fuentes policiales han explicado en Europa Press que dos de los detenidos en Almería son candidatos del PSOE en la localidad, concretamente los números 2 y 5. En Melilla, también está implicado el regidor de Distritos, Mohamed Al-Lal, de Coalición por Melilla (CpM), que gobierna la ciudad autónoma en coalición con el PSOE.
Según ha informado la Policía Nacional, las 10 personas detenidas en Melilla han sido puestas en libertad después de haber prestado declaración. Todos están acusados de formar parte de una trama para alterar las elecciones municipales con votos por correo que compraban a vecinos de los barrios más humildes. Además del regidor de CpM, también han detenido el yerno del líder del partido. El policía estima que los detenidos habían comprado hasta 10.000 votos por correo, alrededor del 90% de todos los que se habían pedido para el 28 de mayo. El aumento inusual de solicitados levantó las sospechas de la policía, que no descarta que haya más partidos implicados.
La investigación de Mojácar todavía es incipiente y está bajo secreto de sumario. La Guardia Civil ha puesto en marcha este miércoles una operación contra la compra de votos por correo con “decenas de registros” y al menos siete detenciones, a pesar de que hay tres investigados más y no se descarta que el número de detenidos pueda aumentar. Un vecino de la localidad a quien la trama corrupta habría ofrecido comprarle el voto fue quién denunció el caso a la policía. Todavía se desconoce cuántos votos por correo están afectados en este pueblo, donde el PP gobierna con mayoría absoluta.
PSOE y PP intentan sacar rédito de los escándalos
Tanto el PSOE como el PP han intentado sacar rédito de los dos escándalos. Los socialistas melillenses, que están en el gobierno de la ciudad autónoma junto a Coalición por Melilla, se han desmarcado de su socio de coalición y han insinuado que puede haber más partidos implicados, a pesar de que no han querido confirmar si se refieren al PP. La vicepresidenta de Melilla, la socialista Gloria Rojas, ha insistido en que “siempre se ha hablado de dos” partidos implicados en la trama de compra de votos, pero ha asegurado que ella “no es quién” para decir el nombre de la otra formación salpicada. Rojas ha asegurado que no volverán a pactar con CpM después de las elecciones.
Por su parte, el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno (PP), ha declarado que el intento de comprar votos en Mojácar es “muy grave” y ha pedido a la policía que llegue hasta el final para esclarecer quién está detrás. Moreno ha afirmado que el voto por correo es “completamente seguro”, pero ha pedido explorar maneras de “reforzarlo”. También ha exigido un castigo ejemplar para los responsables de la trama, puesto que han intentado “alterar la voluntad de los ciudadanos”.
