Yurena ha protagonizado una entrevista muy y muy dura en El Hormiguero, donde ha dejado a Pablo Motos boquiabierto con algunas de las confesiones que ha hecho. En principio, este jueves debían acudir al plató los futbolistas del Barça Pedri y Ferran Torres, pero un cambio de agenda ha forzado a Antena 3 a tener que buscar un sustituto de última hora. La afortunada ha sido la cantante, que no había acudido nunca al programa de las hormigas. El resultado ha sido impactante, ya que ha llegado a decir que intentó quitarse la vida dos veces.
Ella, que tocó el cielo en el mundo de la música gracias al superéxito de No cambié, llegó a odiar esta canción. Durante 10 semanas consecutivas, el tema llegó a ser número 1 mundial por encima de Madonna o los Backstreet Boys: «Esta canción me trae malos recuerdos y recuerdo todo lo que se dijo de mí cuando fui a los platós después. Fueron capaces de todo, fue aberrante… Llegó un punto en que veté la canción porque no quería que estuviera en mi disco«. Ahora la canta, sí, pero modificada.
Nacho Vigalondo ha creado una ficción sobre su vida en Netflix, en la cual se dice abiertamente que Yurena lo pasó muy mal en una etapa de su vida: «Yo era muy confiada y ese fue mi gran error, confiar en las personas equivocadas«.

Yurena confiesa que intentó suicidarse dos veces
«Hay cosas que no me han dejado explicar y otras que saqué a la luz y no aparecen en el documental, aunque me abrí en canal», dice. ¿Por ejemplo? Cuando la cantante Tamara le quitó el nombre artístico: «Me dijeron que me retirarían los discos bajo el nombre de Tamara cuando el nombre lo había registrado yo antes. Me quitaron el registro y lo pudieron hacer porque ellos tenían una gran discográfica y yo estaba en un sello independiente».
En aquel momento, muchos la acusaron a ella de ser «la Tamara mala» y sufrió un linchamiento mediático muy fuerte: «Me destrozaron a mí y a mi madre, lo que se nos hizo fue aberrante y sin ningún motivo más allá de intereses mediáticos y audiencias«.

Yurena lamenta haber recibido injurias, calumnias y vejaciones en un montón de medios: «Intenté marcharme de este mundo dos veces, cuando me veía sola con mi madre en Madrid«. De la mujer dijeron que llevaba un ladrillo en el bolso, algo que ahora ha vuelto a negar: «Con la edad que tenía, ¿cómo iba a hacer algo así?».
Después de aquel infierno, ha aprendido mucho: «Quiero decir a todo el mundo que se lo plantee que por nada del mundo ni por nadie vale la pena ni siquiera pensar en quitarse la vida, aunque la vida la veáis oscura«. Una confesión dura que confía que pueda ayudar.