Dulceida es una de las creadoras de contenido más reconocidas del mundo digital. Aida Domènech, aunque todos la conocen en las redes como Dulceida, acumula más de 2 millones de seguidores en YouTube y en Instagram la cifra supera los 3,4 millones. La exposición mediática de la catalana es un factor positivo, porque al final ha convertido la creación de contenidos en su estilo de vida, pero también incorpora un aspecto negativo: ser un blanco de críticas. La joven, que ha sido madre de su primera hija con Alba Paul conoce de cerca el mundo más oscuro de las redes sociales y se ha sincerado al respecto en una entrevista del nuevo programa de Cuatro, Mis Raíces, con la presentadora Isabel Jiménez.
¿Cómo afronta las críticas dirigidas a su maternidad?
Dulceida y Alba Paul han sido madres de Aria, su primera hija en común, pero antes han tenido que enfrentar comentarios y críticas. «Hubo un señor que hizo varios comentarios de que necesitaba un hombre para embarazarme. Lo único que vivo con más miedo es que mi hija tendrá que enfrentarse a personas así. Creo que estará preparada, pero que tenga que estar preparada para esto…», confiesa en esta entrevista. Incluso sus amigas que son madres la advirtieron. «Un montón de amigas que son madres y se dedican a redes me dijeron que me juzgarían aún más», admite.

Sus padres, Salvador Domènech y Anna Pascual también han sido protagonistas de la entrevista. Aunque su hija es la receptora de la hostilidad de las redes, ellos han sufrido indirectamente por esta situación. «Que a mí me critiquen, o me llamen tonta, me da igual, pero que se lo digan a tus hijos, te hace daño», expresa su madre. Por su parte, su padre también ha visto la crueldad de las redes. «Cuando había Twitter, me lo puse. Dos días lo tuve, pero dije, ¿qué es esto? Me empecé a encender, ¿qué están hablando? Dices, ‘esto no puede ser'».
¿Cómo gestionarán la exposición y el consumo de pantallas?
Uno de los temas que ha abordado durante la entrevista ha sido cómo gestionarán el mundo de las redes con su hija, sabiendo que ellas están inmersas. «Nuestra idea es cero pantallas y móviles. Lo hablaba con mi cuñada que todas las niñas de ocho años tienen móvil y su hija no. Aunque nos pueda costar, porque nos verá haciendo nuestro trabajo, queremos intentarlo hasta los 16», expresa la influencer en una entrevista que ha permitido conocer detalles personales de su vida.