Carlos de Inglaterra y Kate Middleton reaparecieron juntos el fin de semana en un acto que ha hecho hablar muchísimo. Después de unos meses desaparecida y enferma de cáncer, la mujer del príncipe Guillermo se dejó ver muy sonriente en el Trooping the Colour. Está visiblemente más delgada, sí, pero al menos tiene buena cara y no se le ha visto con problemas físicos. Muchos deseaban poder verla en directo para dejar atrás las especulaciones que se habían generado a raíz de la foto retocada con Photoshop que publicaron en el perfil de Instagram oficial de la familia real. Le han visto andar y mostrarse tierna con sus hijos como antes.
Pocas horas antes, ella misma había compartido un comunicado en el que dejaba claro que todavía le quedan meses de tratamiento contra el cáncer. No está recuperada del todo, así que no quería que la gente se ilusionara y pensara que volvería a la vida pública como si nada: «Tengo muchas ganas de asistir al desfile del cumpleaños del rey este fin de semana y espero unirme a algunos compromisos públicos durante el verano, pero también sé que todavía no estoy a salvo».
De hecho, este martes ella ha sido la grande ausente de la primera jornada de Ascot, la competición de hípica más prestigiosa. Kate no ha ido y los Windsor han justificado su ausencia en unas declaraciones que recoge la revista británica

Carlos de Inglaterra podría estar más enfermo de lo que la gente piensa
Ella reconoció que tiene días buenos y otros, peores. Es habitual sentir esta montaña rusa de sensaciones en plena quimioterapia, un proceso complicado por el que también ha pasado su suegro. Carlos III también tiene cáncer, aunque en su caso no ha reducido prácticamente la agenda oficial. No se saben muchos detalles de su estado actual, pero desde un portal del Reino Unido dejan caer que no estaría tan bien como quieren hacer pensar.
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La preocupación alrededor de los dos miembros continúa en un punto alto entre los monárquicos británicos y también entre los curiosos de todo Europa. No ayuda que prácticamente no se sepan detalles de su evolución durante el tratamiento, pero el hermetismo alrededor de este tema parece que ha venido para quedarse.