Las autoridades de la Franja de Gaza, bajo control de Hamás, han elevado los muertos causados por la ofensiva israelí hasta los 45.484, mientras que la cifra de heridos ya alcanza los 108.000 desde que Tel Aviv lanzó su respuesta a los ataques del 7 de octubre de 2023. El ministerio de Sanidad palestino destaca especialmente los 48 muertos y 52 heridos concentrados en las «dos masacres perpetradas por las tropas» de las FDI en las últimas 24 horas.
La cifra, sin embargo, no es definitiva, dado que la situación no permite acceder a todos los cuerpos que aún podrían acumularse en las calles de Gaza, mucho menos identificarlos. «Todavía hay víctimas bajo los escombros, ya que las ambulancias y los equipos de Defensa Civil no pueden llegar», lamenta la autoridad en un mensaje a su canal de Telegram. Además, la cifra de heridos se limita a los que ya han sido trasladados a hospitales dentro del territorio gazatí, si bien muchos de ellos están fuera de servicio.

Presión en el hospital Kamal Aduan
Los ataques de las Fuerzas de Defensa de Israel han mantenido su intensidad en las últimas horas. El pasado viernes, el ejército israelí confirmó la entrada, tras semanas de asedio, al hospital Kamal Aduan, en busca de «milicias atrincheradas» entre el equipamiento sanitario. Hamás, cabe decir, ha negado tener operativos en este centro médico, y ha denunciado el ataque como una «vulneración del Derecho Internacional Humanitario». Trabajadores y pacientes han sido evacuados «ordenadamente», si bien las autoridades locales, así como el movimiento islámico, sostienen su denuncia.
Según la OMS, si bien es cierto que más de un centenar de pacientes pudieron ser trasladados, unos 25 «en estado crítico» no pueden abandonar el recinto, así como unos 60 trabajadores que aún se encuentran allí. El ministerio de Salud, de hecho, ha confirmado este mismo sábado que las fuerzas armadas bajo el mando de Tel Aviv han detenido al director del centro médico, Hosam Abu Safiya. En este sentido, la Organización Mundial de la Salud alerta que las FDI están «llevando a cabo un desmantelamiento sistemático del sistema sanitario en Gaza que representa una sentencia de muerte para decenas de miles de palestinos».
Ataques continuados
Fuera de los ataques al centro hospitalario, el avance israelí continúa en otros puntos de la Franja. Esta misma madrugada, el bombardeo nocturno de las FDI habría dejado 14 muertos, tres de ellos niños, y una «cifra aún por determinar» de heridos. Según la agencia WAFA, el ejército habría lanzado una bomba sobre una casa familiar en el campo de refugiados de Mauasi. Además, cinco personas más habrían muerto en un ataque con drones en Yabalia al Balad, al norte del territorio palestino; mientras que en la misma ciudad las FDI habrían atacado a un grupo de ciudadanos reunidos en la calle, causando la muerte a tres de ellos. A raíz de las operaciones en la ciudad, según han informado las tropas israelíes, se habría detenido a más de un centenar de supuestos milicianos de Hamás. Un responsable militar, en declaraciones a la televisión pública Walla, asegura que «la destrucción de toda la infraestructura en Yabalia tendrá un efecto dominó sobre el norte de la Franja en conjunto».