El PSOE y Esquerra Republicana cerraron el pasado mes de noviembre, dentro del acuerdo para investir Pedro Sánchez, un acuerdo para el traspaso integral de Rodalies. La Generalitat y gobierno español constituyeron a inicios de año la comisión política y los grupos de trabajo que tienen que hacer efectivo este acuerdo que se desplegará de forma progresiva. Aun así, las elecciones anticipadas han dejado en pausa esta carpeta todo y el compromiso del presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, de mantener los compromisos adquiridos con los republicanos en el pasado mandato. La necesidad de este traspaso crea unanimidad entre los catalanes, puesto que, según lo encuesta Ómnibus del Centro de Estudios de Opinión (CEO), casi un 40% valora con un 10 sobre 10 el nivel de necesidad de transferir la gestión del servicio en Cataluña, que obtiene una media de un 7,3 en una escala del 0 al 10, en la cual el 0 significa que es nada necesario y 10 muy necesario. El sondeo también ofrece datos repartidos según la simpatía política y concluye que hay un gran porcentaje de simpatizantes del PP que vinculan el traspaso a la mejora del servicio.
Así, uno de cada dos catalanes, según los datos facilitados por el CEO, no tienen duda que una de las consecuencias de este traspaso, cuando se haga efectivo, mejorará el servicio actual. En cambio, una de cada cuatro personas opina que el servicio continuará igual que ahora y dónde solo un 6% considera que empeorará. Las personas encuestadas simpatizantes de partidos independentistas puntúan la necesidad de este traspaso con medias más altas, entre el 9 y el 8,6, en el caso de Junts per Catalunya, Esquerra Republicana y la CUP, mientras que las personas allegadas al PSC y los Comunes puntúan esta necesidad con un 7, un punto por sobre que el 6 que obtienen por parte de los simpatizantes del PP. Los de Vox son los únicos con una media inferior al 5.
Así mismo, las personas encuestadas próximas a Junts, ERC y la CUP, con porcentajes superiores al 70%, son las que más creen que el servicio mejorará después del traspaso de Rodalies. A continuación, se encuentran los de Comunes-Sumar, puesto que el 53% de sus simpatizantes piensan que el servicio mejorará. Entre las personas encuestadas simpatizantes del PSC un 49% considera que el servicio mejorará, y un 24% que permanecerá igual. Y finalmente, entre las simpatizantes del PP y de Vox, la opinión que el servicio mejorará no es mayoritaria, a pesar de que casi el 40% de las personas allegadas a los populares defiende el traspaso porque cree que mejorará la situación de la red de Rodalies. Los de la formación de extrema derecha son los únicos que creen que con este traspaso el servicio empeorará.

Discrepancias entre los catalanes sobre la gestión de los impuestos
Por otro lado, no hay unanimidad entre los catalanes sobre la posibilidad que la Generalitat, tal como reclama el independentismo en las negociaciones posterior a las elecciones del pasado 12-M, gestione la totalidad de los impuestos que se paguen en Cataluña. Según la encuesta del CEO, una de cada tres personas entrevistadas, el 33% considera que la Generalitat tendría que decidir en exclusiva sobre los impuestos que se pagan en Cataluña, y un 23% defensa que la Generalitat tendría que tener más peso que el estado en materia fiscal. Por el contrario, hay otro tercio que apuesta porque la recaudación se haga de «manera equitativa» entre las dos administraciones. Solo un 5% piensa que solo el estado español tendría que decidir sobre los impuestos de los catalanes.