A la portavoz del Gobierno catalán, Patrícia Plaja, se le ha escapado un taco accidental en medio de la rueda deprisa posterior al Consejo Ejecutivo de este martes que, entre otras cuestiones, se ha centrado en las continuas incidencias que sufre Cercanías y que cuestan 13 millones anuales a las empresas en horas perdidas y en las negociaciones de Esquerra y Junts per Catalunya con el PSOE y Sumar para buscar un acuerdo que facilite la investidura de Pedro Sánchez.
Plaja ha dado un golpe involuntario al micrófono cuando se disponía a responder una pregunta sobre la relación entre el Ejecutivo catalán y el español, efectuada por el periodista Lluís Falgàs, y ha reaccionado con un «joder» totalmente espontáneo. A continuación, la portavoz del Ejecutivo catalán ha pedido tres veces «perdón» y, después de una breve sonrisa, ha procedido a contestar que las «relaciones son entre el Gobierno de Catalunya y uno que está en funciones», en referencia al Ejecutivo de Pedro Sánchez.
El Gobierno catalán pide a Sánchez que se ponga las pilas
Además, el Gobierno ha instado Sánchez a «mover ficha y ser valiente» y le ha reclamado que se «ponga las pilas si no quiere acabar como Feijóo», en referencia a la investidura fallada del candidato del PP. En este sentido, Patrícia Plaja ha subrayado que quien necesita los votos y el apoyo de Esquerra Republicana y Junts per Catalunya en el Congreso es el PSOE si quiere que Sánchez pueda ser reelegido presidente.
Es por eso que ha insistido que el líder de los socialistas español tendrá que «escuchar las legítimas reclamaciones de los independentistas y tomar decisiones valientes». «Por ahora no hay acuerdo, lo están explicando los mismos partidos que negocian. Queda mucho trabajo para hacer y hace falta discreción, evidentemente. Pero también hace falta que la parte interesada se ponga las pilas. De momento, no van al ritmo que toca», ha expresado.