El Hard Rock ha acontecido, sin ningún tipo de duda, en una de las cuestiones estrella de la campaña electoral del 12 de mayo. Es una cuestión casi histórica en la evolución política de los últimos quince años en Cataluña. Tanto es así que también ocupó las tareas de la policía patriótica española y fue objeto de estudio e investigación de la operación Cataluña. Así lo confirma un documento con sello de «confidencial», al cual ha tenido acceso El Món, a incorporado a la macrocausa Tándem, el sumario que investiga las operaciones del comisario de inteligencia jubilado José Manuel Villarejo. El documento también consta a las actuaciones judiciales en Andorra sobre la rama del Principado de la operación Cataluña. La intención de los hombres del entonces ministro Jorge Fernández Díaz era liar entre la gran inversión prevista en Cataluña a través de casinos y los líderes políticos del movimiento independentista.
El documento, con fecha de 29 de diciembre de 2012 delata, como la policía patriótica ya está plenamente inmersa en la operación Cataluña, y más después de las elecciones avanzadas que dieron de nuevo la presidencia a Artur Mas. En definitiva, se trata de un “balance” de las actuaciones e informes respeto “el trabajo de inteligencia asignado” que bautizan como AEC, acrónimo en castellano de Actividades en Cataluña. El informe mezcla el proyecto Eurovegas y Barcelona World, la base del que después se denominaría Hard Rock, con la posible financiación irregular de CiU, así como las conexiones con el lobby judío. El documento también contiene una sorpresa: la policía patriótica está inquieta por las “informaciones contradictorias” que está recogiendo “el equipo conjunto” de la policía patriótica”, por un lado, y el Centro Nacional de Inteligencia (CNI), por la otra. De hecho, la investigación sobre Eurovegas despertó la guerra de gorras entre la brigada política y el CNI.

«Ciertas reservas» y la corona española
Según el documento de carácter confidencial –y que ahora el titular del juzgado central de instrucción número 6, Manuel García Castellón, ha declarado «secreto»– recomienda a la Dirección Adjunta Operativa (DAO) del Cuerpo Nacional de Policía, que dirige parte de las operaciones de la brigada política, que esté al caso. «Se mantienen ciertas reservas respecto al contenido de los informes de inteligencia del CNI, con datos que dicen que provienen de fuentes infiltradas de la en torno al presidente Artur Mas«, indica el texto. Unas fuentes y unos informes que aseguran que «los lobbies judíos que desean instalar la central de juegos Eurovegas en Cataluña, aseguraron a los colaboradores directos de Mas,(…) que inyectarían a las arcas de CiU el 5% de las inversiones que los permitirían, unas generosas autorizaciones de volumen edificable».
Estos informes hicieron levantar las orejas a la policía patriótica porque «no coincidían con los informes» sobre Eurovegas «aportados por el equipo conjunto de Interior, formado por el CNP y la Guardia Civil, que aseguran que las condiciones draconianas que pretende el señor Sheldon Adelson, -el magnate, ya muerto, que impulsaba el proyecto- hacen inviable su ubicación a cualquier lugar del estado español y que, en todo caso, seria en la Comunidad de Madrid, donde se instalarían de la mano del magnate judío M.Rich, teniendo presente el vínculo estrecho que mantiene con la corona». «Respecto a las informaciones contradictorias que se están generando entre Interior y CNI tendrían que resolverse», reclaman a la dirección de la operación Cataluña y más en hechos como este de Eurovegas, «de enorme gravedad».
Poner orden
La ‘investigación’ sobre Eurovegas, abuelo del proyecto Hard Rock, pose en evidencia la batalla que tenían para tener información sobre el independentismo entre la policía patriótica y los servicios de inteligencia españoles. Así, alertan que estos «enfrentamientos» y «acciones» no solo «debilitan las actuaciones» sino que, además, caen en el «riesgo de ser descubiertas» y «alertan los objetivos». En este marco, reclaman a la Dirección Adjunta Operativa más «cobertura» para los integrantes de la policía patriótica como la tienen los agentes encubiertos operativos del CNI. En caso contrario, el documento concluye que «poco se avanzará al erradicar el grave riesgo que supone el independentismo».