Matías Prats y Susanna Griso han sido los invitados de El Hormiguero este miércoles. Pablo Motos los ha querido invitar como dos de las caras más representativas de la cadena en este 35º aniversario, dos presentadores marca de la casa. La complicidad entre ellos ha sido más que evidente, pero es que también estuvieron muchos años presentando juntos los informativos. Después de toda una vida ligada a este canal, ambos han revelado anécdotas desconocidas que han sorprendido a los televidentes.
La reunión más surrealista de Matías Prats con el jefe supremo de Antena 3
Quien más ha hablado ha sido Matías Prats, que ha revelado que tuvo un momento complicado solo un año y medio después de debutar como presentador: «Creo que esto no lo sabe nadie, más allá de mi familia. Pero recibí una llamada de la cúpula, del presidente de Planeta y de Antena 3, que me decía que quería verme«. Ante aquello, se hizo a la idea de que no había cumplido con las expectativas y que lo despedirían porque no estaba logrando suficiente audiencia: «Cuando Jesús Hermida me fichó, me dijo que mi misión era remontar las cifras».
¿Y qué pasó en aquella reunión? Él, muy nervioso, se quedó sin palabras cuando el jefe máximo le dijo que su nieto solo comía cuando lo veía a él en la pantalla. Totalmente estupefacto, ya que no era eso lo que esperaba escuchar, dice que aún recuerda la cara de sorpresa que puso al oír estas palabras y no todo el discurso de despedida que se había imaginado.
El problema de salud que preocupó a Matías Prats
En otro momento de la entrevista, Matías Prats también se sinceró sobre su salud. Mucha gente especula con una posible jubilación del periodista, que este año cumplirá 75 años, pero él parece muy cómodo con su rutina. Ha tenido algún susto médico, por ello, tal como confesó en esta intervención televisiva. El más grave, cuando encontraron que tenía trombos en los pulmones.
«Pasé por una experiencia de trombos pulmonares… Y todo comenzó, sorprendentemente, cuando sufrí tres desprendimientos de retina consecutivos. Tuve que estar en esa postura boca abajo, mucho tiempo en la cama y sin moverme. No me inyectaron heparina, así que perdí facultades y me sentía muy cansado. De hecho, me movía con dificultad», ha explicado.
Preocupado, explica que consultó todos estos síntomas con un doctor y que le dijo que acudiera al hospital para hacerse pruebas: «Allí se dieron cuenta de que tenía dos trombos pulmonares que me podrían haber causado un problema realmente grave«.
Susanna Griso habla de su relación con los políticos
Susanna Griso, por su parte, ha hecho un repaso a su trayectoria y ha sorprendido al manifestar abiertamente su opinión sobre los políticos. Ser presentadora de Espejo Público hace que tenga que entrevistarlos con frecuencia y, esto, ha generado curiosidad en Pablo Motos. ¿Tienen buena relación entre ellos fuera de cámara? En primer lugar, ha reconocido que ha ido a comer con todos los presidentes: «He comido en Moncloa varias veces«.
¿Con quién ha tenido más feeling? Sorprendentemente, con Mariano Rajoy: «Te diría que es él con quien más veces he comido. Quizás porque lo pillé en el momento en que repetían elecciones y debía estar aburrido. Nos llamaba de vez en cuando. Hubo un día, recuerdo, que tuve que dejarlo todo con la profesora de Pilates en casa. ¿Cómo podía ser que mi agenda fuera más importante que la del presidente del gobierno?».
Las comidas de Susanna Griso con Mariano Rajoy no tenían nada que ver con las que ha podido tener con Pedro Sánchez, claro. ¿Qué ha dicho sobre él? «Hace tiempo que no como con él, así que no te los puedo comparar. Solo te diré que, en las distancias cortas, son afables y no te regañan directamente. Lo que hacen es intentar seducirte cuando te tienen cerca. También te digo que a mí no me condiciona lo más mínimo el hecho de comer con ellos».
Matías Prats, por su parte, decía que él tuvo muy buena relación con Adolfo Suárez: «Llegamos a hacer deporte juntos y a comer alguna vez. Con el resto de presidentes del gobierno español también he mantenido buena relación como periodista, pero tomé distancia».
