Joaquín Torres y Raúl Prieto han confirmado que se han separado después de 13 años juntos y todo el mundo del corazón se ha quedado boquiabierto. Nadie esperaba que uno de los matrimonios más consolidados del star-system acabaría rompiendo y, menos aún, de una manera tan fría. Han pasado casi cuatro meses desde que rompieron, pero no se había sabido hasta ahora que lo ha confirmado el arquitecto. En unas declaraciones a El Español, ha dicho que ha sido el exdirector de Sálvame quien lo ha dejado: «Estoy muy triste y ha sido un golpe«. Mientras Raúl Prieto publica fotos en Ibiza con un grupo de amigos, Joaquín aprovecha para sacar a la luz cuál cree que ha sido la causa de esta ruptura.
Hay que recordar que Joaquín Torres ha atravesado una época muy complicada. Después de sufrir un accidente, los médicos tuvieron que operarlo varias veces. Y, mientras tanto, tuvo que cuidar de sus padres mientras la madre enfermaba hasta que terminó falleciendo. Luego se peleó con el hermano por la herencia… Que a todo esto se le sume una ruptura, convierte el 2025 en uno de los peores años de su vida sin ninguna duda.
¿Por qué han terminado realmente Joaquín Torres y Raúl Prieto?
¿Cuál es la causa real del final de esta historia de amor? Parece que tenían problemas de antes y que Raúl Prieto habría acabado harto de tantos problemas de su marido: «Creo que cuando tienes una pareja debes saber que hay unos fundamentos. Las dos personas deben sostener esta base sólida, al menos esa es mi idea de relaciones de pareja. Pues bien, en nuestro caso no ha sido así y me sabe muy mal».
La versión no oficial de la ruptura dice que Raúl ha encontrado «demasiados problemas» y «demasiados contratiempos» en su marido y ha dicho «basta»: «No ha podido con tanto». Encima, cuando el principal perjudicado es el otro… De la decepción de las palabras de Joaquín Torres se extrae, de hecho, que Raúl no habría cumplido con las expectativas que te marcas en cuanto al apoyo que te dará la pareja en un mal momento: «Las relaciones de pareja implican compromiso. Y sé que lo que me ha tocado vivir en el último año no ha sido fácil, con muchas dificultades«.

«La vida es eso, también es dolor. Yo acepto la decisión de Raúl, pero nadie me puede quitar mi tristeza«, prosigue. Lo que deja claro es que no habrá reconciliación: «Necesito procesarlo todo y aún no me encuentro con fuerzas». El otro aún no se ha pronunciado, así que ahora mismo todos los esfuerzos de los reporteros y de la prensa rosa en general es encontrar dónde se esconde para intentar que explique su versión.