Carol Rovira alaba el Delta del Ebro en una entrevista muy personal

Carol Rovira triunfa como una de las actrices más reconocidas en el territorio catalán y también fuera de él. Su papel de jurado en Eufòria le ha ayudado a congregar a todavía más fans y, actualmente, atraviesa uno de los momentos más dulces de su vida. Siempre había tenido claro que se dedicaría al mundo de la interpretación, desde que era muy pequeña y corría por Las Tierras del Ebro que le han visto crecer. Hoy, ha concedido una entrevista muy personal precisamente a un medio local de allí llamado A Prop Ebre.

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La actriz no se esperaba que TV3 la contrataría para ayudar a los concursantes de Eufòria en el aspecto más artístico: «Es una de aquellas experiencias que te llegan y te hacen feliz». Ella fue la coach de interpretación en la primera edición, un rol que no quiso repetir al año siguiente porque creía que ya había dado todo lo que podía dar: «Creía que era sano plantarme allí y ceder mi lugar a otra persona que quizás tenía otras ideas más innovadoras«.

En aquel momento, la preguntaron qué pensaba de pasar a la otra banda y formar parte del jurado: «Me parecía tan difícil… ¡Tenía que tener una inteligencia emocional y una asertividad tan grande! Al final, me dieron el empujón que necesitaba y me ha encantado. Se aprende mucho haciendo televisión y ahora mucha gente me conoce gracias al programa».

Pocos saben que Carol Rovira estudió en el Conservatorio de Tortosa, que sabe componer y que toca el clarinete con mucha profesionalidad. En los últimos años, ha ido sacando canciones de vez en cuando y deja claro que lo seguirá haciendo porque la hace «muy feliz».

En su primer casting, tuvo suerte y la cogieron para trabajar en un musical sobre la Guerra Civil. Cuando se acabó aquella primera experiencia, dice, fue cuando realmente se dio cuenta de que necesitaba experimentar otra vez la catarsis y la purgación que sentía encima del escenario.

¿Qué opina Carol Rovira del Delta del Ebro? ¿Viaja hacia allí con frecuencia?

Como no podía ser de otro modo, el medio ha querido saber cuál es su relación con el territorio catalán en el que se crio. Carol Rovira ha confesado que tiene el Delta dentro del corazón: «Para mí el Delta lo es todo. Creo que soy quien soy por el Delta y siempre he sido muy defensora de mis raíces y del territorio. No tiene precio y conecta con la esencia de un mismo. En la ciudad no lo sientes, esto, allí te desarraigas».

«Este año he estado viniendo bastante al Delta y ahora me pasa que no puedo dormir cuando estoy en Barcelona porque escucho a los autocares y creo que me pasarán por encima. Aquí, en cambio, siento las ranitas», ha explicado. «El Delta es mi esencia y no sería quién soy si no hubiera nacido en este entorno. Soy muy feliz aquí haciendo una paella con la familia. Aquí tengo la capacidad de ser feliz de una manera muy sencilla», ha añadido Rovira.