El nacimiento de la hija-nieta de Ana Obregón centra las conversaciones de todo el mundo. Que haya organizado una gestación subrogada con el esperma de su hijo muerto ha llegado, incluso, a la prensa internacional. Todo el mundo se pone las manos en la cabeza al imaginarse lo extraña que debe de ser esta situación, pero ella se muestra orgullosa de haber cumplido la última voluntad de Álex Lequio. Ahora que se está hablando de los problemas legales que tendrá en reconocer que la niña es biológicamente de su hijo, aparece en escena otro personaje. Hablamos de Carolina Monje, la diseñadora con quien salía Álex cuando murió.
Desde
Tenían una relación consolidada y la chica había estado a su lado durante todo el tratamiento contra el cáncer. Tenían pensado formar una familia más adelante, pero ella no quería continuar con estos planes si él ya no estaba: «La gente próxima a Carolina transmite que el deseo que tenía era ser madre con él porque lo habían pensado juntos. Ahora bien, ser madre en solitario no lo habían planeado. Ella no quiere tener un hijo sola, este deseo no se ve con capacidad de cumplirlo porque no era lo que habían imaginado».

Ana Obregón, enfadada con la nuera por negarse a cumplir la última voluntad del hijo
Descartado que ella participara en este tipo de deseo macabro, habría sido cuando Ana Obregón habría empezado a informarse sobre las gestaciones subrogadas en Estados Unidos. Casualidad o no, parece que esta negativa de la joven no le gustó porque rompieron toda la relación cuando Álex Lequio murió. Carolina no tardó mucha en decidir rehacer su vida y, de hecho, este octubre pasará por el altar con su nueva pareja.
Desde que ha salido a la luz el nacimiento post mortem de la hija de su ex, la diseñadora ha optado por la discreción y se ha ocultado para evitar las preguntas de los periodistas sobre el tema. De hecho, incluso ha hecho que su cuenta de Instagram pase a ser privada para evitar comentarios o mensajes que no quiere responder.